25 marzo 2021

demasiada liquidez

 Ha habido tanta liquidez que todo ha subido como la espuma. En particular ciertas cosas como el bitcoin… ¿Cuándo se van a plantear los bancos centrales cortar con esto? Pues el Banco Central de Canadá ha optado por cerrar el grifo ya. No se cierra ya que los estímulos fiscales están basados en esta enorme liquidez. O se da pasta a los gobiernos para que inyecten dinero en política fiscal, o no se reactiva la economía… ¿Cuándo saldremos de esta dicotomía?

La liquidez lo inunda todo

La enorme cantidad de liquidez inyectada por los bancos centrales inunda todos los mercados de activos: los tradicionales y los nuevos mercados digitales. Empieza a haber ciertos indicios de excesos en determinados mercados de activos. Sirvan de ejemplo el bitcoin,  las SPACs, y los NFT.

Bitcoin. En una interesante entrevista con el CEO de Microstrategy, Michael Saylor, quien ha destinado una gran cantidad de la tesorería de su compañía a comprar bitcoins, basa su recomendación en la compra de la cripto divisa en la limitación del número máximo de bitcoins que pueden llegar a existir (21 millones), como contraposición a la incesante creación de dinero por parte de los bancos centrales, principalmente en EE.UU., Eurozona y Japón.


La atracción de nuevos inversores en masa, tanto individuales como empresariales, a la fiebre del bitcoin ha provocado que su precio se haya multiplicado por nueve en el último año. Anuncios como el realizado por Elon Musk, comunicando que se podrán pagar los coches TESLA con bitcoin han ayudado a hacer subir el precio de la criptomoneda. Sin embargo, omiten una información fundamental: el bitcoin no es una moneda oficial de pago. Por lo tanto, quien pague la compra de su nuevo TESLA con bitcoin no debe olvidar que hacienda (la española, la estadounidense o la que corresponda), le cobrará el impuesto correspondiente a la plusvalía obtenida por la revalorización del bitcoin, calculada como la diferencia entre el precio en euro (o dólares) al que compró los bitcoins, y el precio del bitcoin el día de entrega de los mismos como pago del coche. Es un importante matiz que se suele ignorar.

El bitcoin podrá servir como inversión alternativa, pero no como medio de pago, ya que el pagador tendrá que tener en cuenta el impuesto sobre las ganancias de capital por la revalorización de los bitcoins vendidos o entregados en pago.

SPACs (Special Purpose Acquisition Company). Son compañías "vacías" que salen a cotizar a la bolsa con el objetivo de captar dinero y adquirir, en el plazo de dos años, alguna compañía no cotizada. De nuevo, en EE.UU. se está asistiendo a una fiebre por este tipo de compañías sin demasiada racionalidad. Alguna de estas SPACs ha llegado a tener subidas significativas en su valoración teniendo en su balance sólo "caja". En los dos primeros meses del año las SPACs han captado más de $56.000 millones en EE.UU. y más de $8.000 millones en el Reino Unido. La propia SEC (Secuties and Exchange Commission) ha tenido que lanzar una alerta sobre el riesgo de las SPACs cuyo principal atractivo es el "famoso" que las esponsoriza.


NFT (Non Fungible Tokens). Este tipo de activos digitales es tan poco intuitivo para los menores de 30 años que requiere al menos uno o varios artículos para explicarlosCuando las búsquedas en Google de "NFT" casi igualan a las búsquedas de "bolsas de valores" (stock market), es algo que merece la pena analizar. Los Non Fungible Tokens son una especie de criptomoneda, pero en vez de representar dinero, representan distintos tipos de activos como "arte", "tweets" o incluso "música" - con la peculiaridad ("non fungible") de que el activo representado no es reemplazable por otro, como sucede con un billete de 20 euros o con un bitcoin. Para las transacciones se utiliza, principalmente, la red descentralizada de Ethereum, que es una red transparente y públicamente accesible. Ello implica que cualquiera puede ver los detalles de la transacción realizada con NFTs.


Recientemente Christie´s ha adjudicado por $69 millones de dólares una obra digital cuyo precio de salida fue de $100. El comprador ha recibido un token "no fungible" (virtual, no material) que acredita que es el dueño de la obra digital original, aunque nadie puede evitar que se hagan copias idénticas de dicha obra. El CEO de Twitter ha vendido como NFT su primer tweet por nada menos que $2,5 millones.


El bitcoin, las SPACs y los NFT tienen en común que son activos que se ven favorecidos por una fiebre compradora alentada por la enorme liquidez que acaba inundando todo, incluso el mundo digital. Es difícil que los bancos centrales no sean conscientes de que sus políticas son las causantes de estas fiebres compradoras de activos "virtuales". Sin duda, estos excesos son un síntoma preocupante.

Abrazos,

PD1: Y el Papa nos recuerda a María en el final de la Cuaresma:



24 marzo 2021

11.000 millones

El Gobierno ha aprobado un fondo de 11.000 millones para apoyar a empresas, PYMES y autónomos, y ayudarles a hacer frente a la pandemia.

El objetivo es proteger nuestro tejido productivo y el empleo hasta que la recuperación se asiente.

Resumen de lo aprobado:

Las ayudas directas a empresas –las más urgentes y necesarias– serán ambiciosas: 7.000 millones. Se creará asimismo un fondo de 1.000 millones para la recapitalización de PYMES, y otra línea de 3.000 millones para la reestructuración de la deuda del ICO.

Las ayudas directas se ejecutarán a través de las CCAA, si bien el Estado fija condiciones básicas para evitar diferencias competitivas. El reparto entre CCAA se hará en función del peso de cada CCAA en la caída del PIB y del desempleo. 2.000 M se asignarán a Baleares y Canarias.

Las ayudas directas irán destinadas a aquellas empresas que hayan perdido al menos un 30% de su facturación con respecto a 2019, y a aquellos sectores que se hayan visto más golpeados como consecuencia de la pandemia (comercio, hostelería, turismo, transporte, cultura, deporte).

Estas ayudas no son reembolsables y cubrirán compromisos de pago contraídos desde marzo de 2020. Tendrán un importe máximo de 3.000€ para empresarios o autónomos que usen el régimen de estimación objetiva en el IRPF, y de 4.000 a 200.000 euros por empresa en el resto de casos.

Las empresas receptoras de estas ayudas deberán mantener su actividad hasta el 30 de junio de 2022, y no podrán repartir dividendos ni aprobar incrementos en las retribuciones de la alta dirección durante un periodo de dos años.

Además de las ayudas directas, se crea un nuevo Fondo de recapitalización de empresas afectadas por COVID, dotado con 1.000 millones de euros, que permitirá reforzar –con el apoyo del sector público– la viabilidad económica de PYMES de tamaño mediano.

La tercera línea de apoyo –la reestructuración de la deuda con aval público– contemplará 3.000 millones para facilitar la extensión de los plazos de la deuda, aliviar costes financieros y también para reducir el nominal de estas deudas.

Finalmente, este RDL extiende hasta fin de año las moratorias concursales, de forma que las empresas tengan tiempo para beneficiarse de este programa de ayudas y restablecer su situación patrimonial, evitando quiebras innecesarias que dificulten la recuperación económica.

En definitiva, el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno es un instrumento que despliega, una nueva ayuda al tejido empresarial de nuestro país, para proteger el empleo y facilitar la recuperación.

Ahora falta solo una pregunta. ¿Cuándo se pondrá en marcha? O será como el fondo de ayuda de la UE del año pasado que sigue sin aparecer, porque somos incapaces de instrumentar a quién dárselo. Es como lo de la vacunación, buenos propósitos, pero muy mala gestión de la misma… Esa triste sensación de que tenemos ideas, pero no somos capaces de llevarlas a la práctica.

Mientras tanto en Europa vuelven las medidas anti COVID por la nueva ola que aparece. Y aquí dejamos entrar a los de fuera, pero dejamos sin Semana Santa a los españoles. ¡Qué tipical spanish! No importa que se arruine la gente so pretexto de que ellos están para salvar nuestra salud… Es una mierda…

Abrazos,

PD1: "Es mejor cojear por el camino que avanzar a grandes pasos fuera de él. Pues quien cojea en el camino, aunque avance poco, se acerca a la meta, mientras que quien va fuera de él, cuanto más corre, más se aleja." (San Agustín)

23 marzo 2021

pobre BBVA

 

Sigue con su mal de ojo, su mayor problema. Hace años decidió invertir una gran suma en comprar un banco turco, el Garanti. Compró caro y muchos no entendimos esa diversificación, tantas veces comentadas en estas líneas. Lejos de amilanarse, siguió comprando para hacerse con el control total. Desde entonces, ha sido su calvario. Turquía es lo que es, que lo sabemos muy bien. Y el futuro en Turquía no es que sea muy cierto.

Para muestra: Erdogan echa al gobernador de su Banco Central, y se lía parda:

El bono a 10 años:


Y la lira turca no levanta cabeza. Lo que le estará costando esa depreciación masiva de su divisa…


Ayer su bolsa se desplomó:


Y la caída en los últimos años del MSCI Turquía es enorme:


El banco Garanti (ayer -19%), culpable de los males del BBVA, lleva una marcha triunfal:


Y el BBVA se la metió casi un 8% ayer, acumulado un desastre:


Lo gracioso es que el tipo del BBVA, que decidió invertir en el banco turco, es desde 2019 el presidente del BBVA, y no estando del todo contento, nombró a un turco como CEO del banco Garanti hace poco, denotando un nuevo despropósito…

Abrazos,

PD1: ¿Te has confesado ya? Se acaba la Cuaresma y te lo estás perdiendo. No sabes lo contento que sales tras pedir perdón por los errores cometidos. Somos débiles, y el sacramento de la Penitencia, nos da la gracia para no volver a caer tan frecuentemente. Y no, no sirve auto-perdonarnos nosotros mismos. Es pura soberbia.

Si ha pasado mucho tiempo que no hablas con un cura, hazlo y le pides que te ayude a confesarte. Sales con una paz espectacular, sales con esa sensación de haber recibido el perdón de Dios, no del cura, que es para echarse a llorar…, o a reír de la alegría que te deja.

22 marzo 2021

ay de los gestores, ay!!!!

Primero negocios de alarmas de Prosegur, ahora emular a Amazon… No saben lo que hacen… Si es una teleco, hombre!!! ¿Estarán aburridos?

Telefónica lanza Tu.com, su tienda online para entrar en el negocio de Amazon

El operador puso en marcha en septiembre, silenciosamente, una web de venta de tecnología desde la que se pueden comprar teléfonos, tablets, wereables o televisores, entre otras cosas.

Telefónica tiene abierta desde septiembre de 2020 una página web en la que vende tecnología. Se trata de Tu.com, un e-commerce acerca del cual el operador ha evitado hacer comunicado oficial alguno. Ordenadores, tablets, teléfonos móviles, televisores, relojes inteligentes, aspiradores o luces inteligentes son algunos de los productos que comercializa la compañía de telecomunicaciones desde esta página. Marcas como Apple, Samsung, Oppo, Huawei o Xiaomi se encuentran dentro de su catálogo.

Desde el operador explican que se trata de un proyecto piloto, pero que ya funciona a pleno rendimiento. Las mismas fuentes declaran que, aunque se lanzó durante la pandemia, estaba diseñado con anterioridad a la covid-19. La corporación azul ha realizado varias campañas publicitarias -en las que no destaca que está detrás de la iniciativa- para amplificar el proyecto.

En cualquier caso, el objetivo de Telefónica es sondear el comportamiento del portal. Tu.com servirá para evaluar las posibilidades que existen de competir en un negocio liderado por empresas como Amazon, MediaMarkt, PC Componentes, eBay o Aliexpress. El sector del e-commerce ha sido sumamente importante durante los meses del confinamiento. Su crecimiento se ha disparado y, si ya era una realidad incuestionable para un grupo de población concreto, ahora lo es para prácticamente todo tipo de perfiles. La obligatoriedad de las compras a distancia para capear la situación ha borrado la desconfianza que en muchos casos rodeaba las operaciones de compra a través de Internet.

"Es un proyecto de innovación en e-commerce para experimentar con nuevas experiencias digitales en este mundo. En función de los resultados obtenidos, Telefónica verá lo que hace. Evaluará si llevarlo un paso más adelante o aplicar todo lo aprendido a otras iniciativas y experiencias dentro de la compañía", explican fuentes cercanas al operador.

El proyecto está liderado por el departamento que dirige Chema Alonso, Chief Digital Consumer Office (CDCO), en español el responsable de los negocios de consumo del operador. Alonso ocupa este cargo desde finales de 2019, tras la reestructuración impulsada por José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica.

Telefónica permite compensar la huella de carbono generada con cada compra de un producto en Tu.com

Tu.com guarda muchas similitudes con otros e-commerce, como es el caso de Amazon. Ofrece posibilidades similares al usuario. Desde la web de tecnología de Telefónica es posible adquirir artículos a plazos (entre 12 y 36 meses para clientes de Movistar, y entre 12 y 24 meses para el resto de usuarios), recibir la compra en 24 ó 48 horas y realizar una devolución sin explicaciones. Son características que han ayudado a que Amazon se convierta en el mayor comercio online del mundo. "Puedes probar tus dispositivos y devolverlos si no te convencen, sin necesidad de justificación, en un plazo de 14 días naturales desde la recepción del producto", explica Telefónica en la página web de su e-commerce.

El punto diferencial respecto a otras tiendas online es que es posible compensar la huella de carbono con cada compra realizada. De hecho, el comprador puede conocer la huella de CO2 que genera cada pedido. Durante las transacciones, la web permite elegir un proyecto para compensar este indicador. Una vez seleccionado el proyecto, el cliente recibe un certificado de compensación garantizado por Telefónica.

Telefónica se abre a otros negocios

La compañía española lleva meses inmersa en la diversificación de su negocio. El mercado tradicional de las telecomunicaciones no permite mucho más margen de crecimiento, sobre todo debido a la presión comercial que ejercen los pequeños operadores.

En septiembre de 2019 Telefónica anunciaba la compra del 50% del negocio de alarmas de Prosegur por poco más de 300 millones de euros (305,61 millones de euros). Además, hace unos meses se hacía pública su estrategia para el negocio de la nube de cercanía (edge computing). Tampoco se puede pasar por alto el músculo que ha insuflado a áreas como la ciberseguridad, Internet de las Cosas o el Big Data. De hecho, ha creado un área específica denominada Telefónica Tech para aglutinar estos negocios.

En esta misma línea, hace sólo unos días hacía pública su oferta de seguridad a través de drones, otra veta que quiere explotar. Una oferta para la que utilizará la tecnología 5G, por las oportunidades en términos de vigilancia 'autónoma' que puede aportar a este tipo de aeronavesTelefónica mantiene ya conversaciones con Aviación Civil para dirimir las condiciones en las que puede ofrecer el servicio con seguridad y garantías jurídicas.

Cuando esta es la realidad: Vende sus activos buenos para tratar de calmar al mercado harto de su abultada deuda y con una caída de cotización abultada:

Abrazos,

PD1: “Haz como si cada día fuese una vida”(Séneca). ¡Aprovecha cada instante, haz rendir tu tiempo y los talentos que Dios te regaló; ponlos a su servicio y al de los demás! No desaprovechemos las ocasiones que nos pone Dios para hacer el bien y ayudar a los demás… No seamos vagos y pensemos que hacemos muy poco… Es mucho cada vez que hablamos o ven el ejemplo en nosotros…

18 marzo 2021

la bolsa...

El bla, bla, bla de la bolsa

Si sube la inflación, los tipos de interés no sólo no bajarán, lo esperable es que tarden menos en volver a subir y, lo que es más importante, tiene sentido pensar que los bancos centrales no inyectarán tanta liquidez

Estos días, el comodín de moda para explicar las “bajadas bursátiles” es el aumento de la rentabilidad de los bonos de largo plazo. El motivo de que esto esté pasando es el aumento en las expectativas de inflación. Esto es un hecho, la subida de las materias primas ha sido muy rápida e intensa, desde el petróleo hasta el cobre pasando incluso por las relacionadas con la alimentación. Esto a su vez se debe a la creencia en una mayor actividad económica este año que está disparando la producción, así como a problemas en las cadenas de suministro globales tras tantos meses al ralentí. La consecuencia será que los IPC se elevarán los próximos meses, algo que por otra parte llevan buscando los bancos centrales desde la crisis de 2008. Hasta aquí todo parece lógico: si sube la inflación, los tipos de interés no sólo no bajarán, lo esperable es que tarden menos en volver a subir y, lo que es más importante, tiene sentido pensar que los bancos centrales no inyectarán tanta liquidez e incluso puede que se planteen retirarla. Esto ha llevado a que por ejemplo el bono a 10 años norteamericano que cerró 2020 en torno al 0,90% (los mínimos del año pasado fueron 0,38%) ahora ronde el 1,5%.

¿Qué “problema” hay con esto? Económicamente, que se encarezca la financiación de estados y empresas no es buena noticia, más si sucede por un aumento inflacionario que no procede de una mejora económica real, de un consumo mucho mayor que lo justifique sino sobre todo de un movimiento especulativo del precio de las materias primas. Tampoco es que sea un drama porque ya hay tanta deuda emitida que el que sea algo más cara la que se vaya a colocar estos meses no supone una tragedia financiera, más bien hay que sorprenderse de las estupendas condiciones que han vivido –y aún disfrutan- los emisores de deuda. Que hasta España pudiera emitir deuda en negativo a 10 años el diciembre pasado es desde luego mayor noticia que el que ahora esté al 0.37%. Más bien parece una corrección lógica a aquella “exuberancia irracional”.

Para un típico inversor o especulador bursátil la alternativa pueden ser las materias primas, las criptomonedas, derivados… pero no desde luego el tipo de interés que ofrece la renta fija

Sin embargo, hay una teoría, ampliamente extendida por los medios, que dice que la subida de la rentabilidad de la deuda provocará caídas bursátiles dado que si es más rentable la renta fija que los dividendos que ofrece la renta variable, los grandes inversores preferirán destinar su ahorro a comprar deuda y no a comprar bolsa. Puede que suene bien, pero no es cierto. La subida de la rentabilidad de la deuda viene porque en las subastas hay menor demanda; si hubiera más, el emisor bajaría en lugar de subir las rentabilidades, luego a día de hoy no hay más dinero destinado a la renta fija. Además, ¿quién vende en bolsa, un activo que últimamente se mueve más de un 1% al día para comprar bonos a diez años a esos tipos? Es puro desconocimiento de los flujos de liquidez en los mercados. Y, por cierto, el bono a dos años norteamericano, a pesar de esos repuntes inflacionarios, está al 0,14%, por debajo de como empezó el año y el español está en un -0,53% que desde luego no creo sea atractivo para nadie que no lo compre para después colocárselo a BCE o porque piense que podría caer la rentabilidad aún más. Esto además demuestra que no hay ninguna expectativa real de un cambio en la política de los bancos centrales en el mundo occidental (excepto quizás en Reino Unido) en los próximos meses. Así pues, para un típico inversor o especulador bursátil la alternativa pueden ser las materias primas, las criptomonedas, derivados… pero no desde luego el tipo de interés que ofrece la renta fija.

Máximos históricos

Entonces, ¿por qué “baja” la bolsa? Lo primero es que la bolsa tiene una volatilidad altísima pero su tendencia sigue siendo alcista, lo que ocurre es que cuando cae, por ejemplo, un día el Nasdaq un 3% se amplifica más la noticia que cuando sube un 1% cada día durante tres sesiones. Todo lo más que ha ocurrido es, probablemente influido por esas expectativas que antes comentamos, una gran rotación (en la que, por cierto, se ha visto beneficiado el Ibex respecto a otros índices) por la que han bajado determinados valores (especialmente tecnológicos y los considerados “utilities” -en España el mejor ejemplo es Iberdrola-, justo de los que más avanzaron el año pasado) y han subido otros (los relacionados con las materias primas y los bancos -en España Repsol y BBVA, por ejemplo- que fueron de los más bajistas en 2020 y a los que más benefician las expectativas actuales). Dado que el principal índice bursátil mundial, el S&P500, tiene como valores con mayor peso a Apple, Amazon, Google, Facebook y Tesla, se ha visto perjudicado mientras que en el mismo país el Dow Jones Industrial (que tiene como acciones de mayor peso –porque las mide por el precio de cotización y no por su capitalización- a Goldman, UnitedHealth, Home Depot, Boeing…) se ha comportado mejor. Con todo, ya les gustaría a muchos índices bursátiles del mundo estar a un 4% de sus máximos históricos –conseguidos hace menos de un mes- como lo está el S&P500.

Conviene recordar que cuando una compañía paga un dividendo, se descuenta la misma cantidad abonada del precio de la acción. Es decir, no hay ningún plus para el accionista

Otro aspecto que me gustaría resaltar es la enorme importancia que algunos siguen dándole al tema del dividendo. Hasta siguen saliendo portadas en medios especializados advirtiendo de “estupendas rentabilidades por dividendo”. Todo el mundo debería saberlo pero por si acaso lo recuerdo: cuando una compañía paga un dividendo, se descuenta la misma cantidad abonada del precio de la acción. Es decir, no hay ningún plus para el accionista, la única ventaja es que tiene algo de liquidez de vez en cuando pero con la actual volatilidad, lo que se pueda cobrar de dividendo en todo un año puede perderse en apenas unas horas. Los dividendos son un factor importante para los accionistas de referencia, aquellos que invierten en una empresa pensando en que no la van a vender, para ellos sí es algo a tener muy en cuenta. Pongámonos en el caso del fondo de pensiones que lanzó una oferta para adquirir parte de Naturgy, ¡claro que le interesa recibir altos dividendos periódicos para sus participantes! Pero no olvidemos la cantidad de minoritarios españoles que compraron unos miles de euros en Telefónica o Santander con el argumento de la rentabilidad por dividendo y están perdiendo mucho dinero sin que les consuele haber recibido unos euros cada cierto tiempo. Este y otros mitos erróneos de la bolsa deberían haber desaparecido ahora que se ha popularizado tanto y se supone existe una mayor educación financiera por la facilidad de acceso que da internet para aprender pero… no.

¿Cómo reaccionará Wall Street?

Personalmente creo que hay demasiadas personas, y medios que les dan voz, pretendiendo racionalizar movimientos que no tienen por qué serlo, buscando excusas para todo lo que pasa, y que en muchas ocasiones se quedan obsoletas en una misma sesión porque la dirección que toman los mercados varía muy rápido. Es el típico bla bla bla de la bolsa que aporta elementos literarios a algo que debe ser un instrumento para ganar dinero, sea de forma especulativa o mediante una inversión a largo plazo que pretenda mejorar la nula rentabilidad que ofrece el banco por el ahorro tradicional. Por más análisis que se quieran hacer, ¿alguien tiene claro si Wall Street reaccionará al alza o a la baja por un buen o mal dato de empleo como el que se publica hoy, o si lo que haga la primera media hora –y se explique en las crónicas- quedará desfasado en horas y será de nuevo explicado esta noche con argumentos opuestos? Y no sólo en el muy corto plazo, ¿cuántos con criterios racionales pudieron adivinar hace tan sólo cinco meses el rally alcista de IAG, Santander o BBVA, cómo es posible que con un 2020 horrible y un 2021 que será peor que 2019 seguro, valores turísticos como Meliá estén cotizando a niveles pre-pandemia? Pues lo mismo hasta suben más…

¿Quién hubiera pensado que con una crisis tan grande como la de 2020, iba a tener tanto éxito Tesla que vende un producto bastante exclusivo? Pues lo ha tenido

Al final, los que estamos cada día batallando en los mercados, con estudio y experiencia podemos detectar tendencias o rotaciones como la que comenté antes, pero no conocemos el futuro. Siempre me gusta aprender de mis errores, y uno de los más grandes que recuerdo (por fortuna no me costó dinero pues era sólo una opinión) fue mi menosprecio a finales de 2001 acerca de una compañía que llevaba una caída desde máximos del 90% y cotizaba por debajo de los 18$ a los que salió a bolsa en 1997: “Y más que caerá, ¿Cómo va a tener futuro una tienda que vende libros por internet?” decía mi yo más ignorante… Y es que tendemos a pretender adivinar el futuro y eso es imposible. ¿Quién hubiera pensado que con una crisis tan grande como la de 2020, iba a tener tanto éxito Tesla, que vende un producto bastante exclusivo? Pues lo ha tenido, como en la pasada crisis lo tuvo Apple a pesar de que los consumidores redujeron su consumo y sus productos eran más caros que su competencia. Incluso saliéndonos de la bolsa, otro producto mucho más caro que su alternativa tradicional son las cápsulas de café, y Nespresso existe desde 1986 pero en la España de la anterior crisis con millones de parados, fue cuando se popularizaron. ¿Qué lógica tiene? Pues seguramente se la encontremos pero… a toro pasado. Y en inversiones eso no nos sirve de nada porque rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras...

Abrazos,

PD1: Mañana es San José. Es el ejemplo de padre, el que enseñó al Señor todo desde niño, el que le cuidó y protegió. El que se lo llevó a Egipto para evitar que lo matara Herodes. El que estuvo ahí con la Virgen María. El que le hablaba Dios por sus ángeles y no decía ni mu… Todo un ejemplo de padre y gran intercesor nuestro. Felicidades a los José y Josefas, que tenéis un nombre muy especial.

17 marzo 2021

Para la macro: comparar con el mes anterior

Los próximos meses no hay que hacer cálculos interanuales, ya que la base del año pasado fue muy baja. Hay que calcular todo con respecto al mes/trimestre anterior, para no llevarnos a engaño…

Los economistas advierten de los signos engañosos de la recuperación

Los especialistas recomiendan comparar los datos con los previos a la pandemia y avisan de que el PIB será negativo en el primer trimestre

Nadia Calviño, vicepresidenta tercera del Se cumple un año de la declaración del estado de alarma en España y la imposición del confinamiento domiciliario que se extendió durante casi todo el segundo trimestre del año pasado, con el consiguiente hundimiento de la actividad económica y la mayor caída del Producto Interior Bruto (PIB) en la historia del país, superior incluso a la experimentada durante la Guerra Civil.

Marzo fue el primer mes en el que ya se apreció ese parón, a pesar de que la actividad se interrumpió únicamente los quince últimos días del mes, mientras que en abril el desplome de la actividad no tuvo precedentes. Esto significa que los datos macroeconómicos que se empezarán a publicar de ahora en adelante no podrán compararse en tasa interanual, dado que eso supondría una importante distorsión.

Economistas consultados por Vozpópuli de Fedea, Funcas, el Instituto de Estudios Económicos y el Consejo General de Economistas, entre otros, coinciden en que lo inusual de la crisis experimentada en 2020 impide comparar los datos. Medir los indicadores en comparación con los registrados en los mismos meses del año anterior no servirá para obtener una imagen de la realidad, sino que sólo se conseguirá una radiografía distorsionada del escenario de recuperación.

"Debemos ser extremadamente cautos y rigurosos a la hora de interpretar las tasas interanuales: si bien en condiciones normales se considera que son las que portan mayor información, en los próximos trimestres van a ser muy poco informativas", advierte a este medio Carlos Victoria, investigador en el think tank EsadeEcPol.

Los datos de febrero han servido para conocer cómo avanza la recuperación casi un año después de la irrupción de la pandemia y para ver lo lejos que estamos del punto de partida. "El problema va a venir a partir de marzo, porque las tasas interanuales van a estar distorsionadas por las caídas espectaculares que sufrimos en marzo o abril", explica por su lado Gregorio Izquierdo, director general del Instituto de Estudios Económicos (IEE).

En su opinión, lo interesante ahora mismo es observar los datos en tasa intermensual o intertrimestral, que permiten ver cómo va evolucionando la economía y los "momentos de giro", complementados con un índice que permita comparar siempre con el nivel previo a la pandemia.

Interpretaciones sesgadas de los datos

Coincide con su opinión María Jesús Fernández, economista senior de Funcas, quien cree que la distorsión ya se puede estar produciendo. "Hay indicadores que están dando tasas interanuales negativas, te hacen pensar que están cayendo, pero a lo mejor se están recuperando o estabilizando. Ahora pueden empezar a ser positivos, pero eso no nos dice cómo está la situación actual respecto a cómo estaba antes de la crisis", apunta.

"Las comparaciones interanuales pueden inducir a interpretaciones incompletas de la realidad. Si ves, por ejemplo, un indicador de ventas minoristas que crece en marzo o en abril un 10%, es un dato que no nos dice nada porque está en comparación con un mes en el que estaba todo cerrado, no nos dice nada de cómo están respecto a la situación previa a la crisis", señala.

El mismo problema va a aparecer en indicadores de más peso como el PIB. Fernández explica que aunque en el primer trimestre se esperan caídas tanto interanual como intertrimestral, a partir del segundo y sobre todo en el tercer y cuarto trimestre las tasas pueden ser muy altas, de hasta el 20%, por ser comparadas con niveles extremadamente bajos del año anterior.

El PIB caerá en el primer trimestre

Todos los servicios de estudios consultados se muestran pesimistas con los datos del primer trimestre y contemplan un crecimiento negativo del PIB, de en torno al -0,5% de media, a la vista de los datos que se conocen a cierre de febrero.

"Estamos viendo indicadores adelantados como las ventas de coches, las ventas minoristas, el consumo, la industria… que no son buenos. Si a eso le añadimos que las exportaciones contribuyen de forma negativa al crecimiento del PIB porque la mayoría se dirigen a Europa y Europa no levanta cabeza, es probable que haya una caída del PIB intertrimestral en el primer trimestre", apunta por su parte Antonio Pedraza, presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas (CGE).

Se muestran más optimistas con la evolución del PIB en el segundo semestre, pero aún así advierte de que aunque se produzca un rebote, "será engañoso, porque los problemas endémicos que tiene nuestra economía" no se habrán solucionado.

Se refiere "al paro, al desempleo que se va a producir cuando expiren los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), o la explosión de sociedades en quiebra que va a haber cuando acabe la moratoria", lamenta.

España no se habrá recuperado en 2022

De ahí que el CGE se muestre más preocupado con la evolución de PIB en 2022 y en 2023 que con la de 2021, incluso a pesar de que es el año en que se espera que lleguen más fondos de la Unión Europea a la economía.

"La OCDE y el BCE nos han dicho que en 2022 la mayoría de los países habrán recuperado las cifras de 2019, menos España e Italia. Nosotros vamos a estar por detrás, es en eso en lo que tenemos que compararnos", concluye.

Según los datos que maneja el Ministerio de Economía, las ventas en las grandes empresas cayeron un 7,8% interanual en el mes de enero -una caída superior a la registrada en el tercer y cuarto trimestre de 2020, del -5,8% y -4,5%, respectivamente-.

El consumo de energía bajó un 4,6% a cierre de febrero, lo que lleva al Ministerio a estimar una caída trimestral del 2%, superior a la registrada en el último cuarto de 2020, del -1,4%.

El Índice de Producción Industrial ha bajado un 1,9%, en línea con la caída del 2% que registró en el trimestre precedente; la confianza industrial ha retrocedido un 9,6% a cierre de febrero; el índice de comercio al por menor se ha contraído un 9,5% y la matriculación de automóviles ha caído un 38,4% interanual en febrero.

El Índice de Confianza del Consumidor está un 25,2% por debajo al dato del año pasado, el número de afiliados ha caído un 2,1% en febrero, y el paro registrado ha aumentado un 23,5% frente a febrero de 2020.

Abrazos,

PD1: Impresionante el evangelio de ayer del paralítico que no tenía a nadie que le ayudara a entrar en la piscina. Según las palabras textuales: “Estaba allí un hombre que padecía una enfermedad desde hacía treinta y ocho años"

38 años tirado esperando que le ayudaran. Por supuesto que Jesús se apiada y obra el milagro. Aunque los judíos, con toda su soberbia, le reprochan que “cargue con la camilla” una vez curado, que eso no era lícito…

¿No nos pasará lo mismo hoy a nosotros? No estaremos llenos de soberbia y no veamos a esos que necesitan de nuestra ayuda desde hace 38 años… No seremos tan torpes de no entender nada de lo que pasa a nuestro lado, a esas personas que están solas y abandonadas… Regalemos sonrisas a todo el que se cruce con nosotros, que hay mucha soledad en el mundo, y mirémonos la soberbia, que per se, no deja ver nuestras actuaciones…

16 marzo 2021

se debería ir a la media

No es normal la situación actual de los mercados. Con unos bonos al alza, con una pendiente brutal de la curva de tipos, con unas bolsas que se benefician del flujo de dinero que siguen lanzando los bancos centrales a los mercados, llegamos a esta disparidad:

Es la relación entre el SP500 y los bonos largos. Y está fuera de lo que conocemos en la historia pasada…

Al menos se debería ir a su media de los años atrás, o bien bajando las bolsas, o bajando los rendimientos de los bonos, con el permiso de la inflación y de un crudo a $68.

Por cierto, en España los Presupuestos Generales del Estado se hicieron calculando el crudo a una media anual de $46, si se mantuviera a estos niveles nos costará una deuda adicional de 10.000 millones más que no tenemos…

Abrazos,

PD1: Hoy se vacunaba mi mujer, por ser profesora, sector de riesgo y tal... Ayer por la tarde le dijeron desde la CCAA que no se iban a vacunar los profesores ya que se había prohibido la vacuna de AstraZeneca. Mira los datos del Reino Unido:

Pobres de los que se vacunaron ayer, estarán acojonados… Menudo debate: ¿Qué es mejor, vacunar de una vez, o no vacunar por sus perniciosos efectos económicos? ¿Qué es mejor vacunar con las consecuencias de ser conejillos de indias, o vacunar y evitar el virus?

PD2: No hablar mal de nadie es una excelente manera de hablar bien de ti... Hay que hablar siempre de lo bueno de las personas, lo positivo…

15 marzo 2021

más cheques en EEUU

Es la diferencia entre EEUU y el resto. Se dan cheques para estimular el consumo, para evitar que muchas familias, las más desfavorecidas, sigan sin nada. En otros sitios, aquí mismo, se dan ayudas a empresas para pagar las deudas, se perdonan las deudas recientemente adquiridas (los ICO), se gastan los políticos en chumineces… Pero dar cheques crea adicción: querrán más…

Cuántas dosis crean adicción

El consumo repetido de sustancias adictivas provoca dependencia de dichas sustancias. Es difícil determinar a priori cuál es la dosis que desencadena la adicción. En cualquier caso, es evidente que, a mayor número de dosis consumidas, mayor el peligro de una fuerte dependencia futura.

Las ayudas financieras "extraordinarias", pero repetidas en el tiempo, igualmente corren el riesgo de crear adicción y dependencia. El caso de las ayudas directas del Gobierno estadounidense es digno de estudio. A raíz del inicio de la crisis económica motivada por la pandemia del Covid-19, EE.UU. aprobó por primera vez en la historia la utilización del "helicóptero monetario": la entrega de cheque directos a más de 160 millones de ciudadanos americanos por simple hecho de serlo o, sin serlo, por tener un número de la seguridad social americana. De hecho, incluso nacionales estadounidenses residentes en España desde hace lustros han recibido los cheques.

En el primer plan de ayudas directas aprobado en marzo de 2020, los cheques eran de $1.200 por persona a los que había que añadir $500 adicionales por cada dependiente menor de 17 años. Teniendo en cuenta el desplome del empleo en el primer momento de cierre económico tras el estallido de la pandemia y como medida totalmente extraordinaria, dicho plan fue ampliamente aceptado. El mensaje en aquel momento se centraba en la excepcionalidad de la situación que obligaba a una medida extraordinaria, en ningún caso recurrente.

En diciembre del pasado año se aprobó el segundo plan de ayudas con una nueva entrega directa de cheques. En esta ocasión la cantidad era de $600 por adulto, a la que se añadían otros $600 por cada dependiente menor de 17 años.

En esta misma semana se aprueba el tercer plan de ayudas directas en menos de un año. En esta ocasión las cantidades son todavía más generosas: $1.400 por cada miembro de la familia, sin límite de edad, con determinados límites de sueldos individuales (ver cuadro).

Después de una tercera "dosis" de ayudas directas, el principal riesgo es considerar que estos estímulos no son extraordinarios, sino permanentes. Lo mismo que tras el primer cheque vino el segundo y ahora el tercero, se tiende a pensar que nada impide que luego vengan el cuarto, quinto, sexto...

Cuando más de la cuarta parte de los ingresos personales proceden de ayudas de los gobiernos, los consumidores acaban dependiendo de estos programas. Si se cortan o no se renuevan, el consumo caería sensiblemente y el crecimiento se vería seriamente afectado. Peligroso sistema. La contrapartida a todas estas ayudas es un déficit público históricamente alto que es financiado, en gran parte, por la propia Reserva Federal americana creando dinero de la nada.

Los programas de compra de bonos por parte de la Reserva Federal y el BCE también eran medidas "extraordinarias y temporales". Después de una década no se ve su final. Con las ayudas directas vía cheques por parte del gobierno de EE.UU. tampoco. Esperemos que no sea el camino al augurado Ingreso Básico Universal por parte del intrigante World Economic Forum.

Abrazos,

PD1: Hay que ser muy generoso estos días de Cuaresma. ¿Te has acordado de dar algo a Cáritas para los más desfavorecidos? Hay tanta gente que alimentar, que poco es mucho y nada es inaceptable… Habla con Dios que te diga lo que debes hacer. No debemos mirar para otro lado, o pensar que “papá estado” es el que lo va a hacer… Es un imposible, ya que “papá estado” está arruinado… Ahora es cosa nuestra, con generosidad!!!

12 marzo 2021

inflación

A la fuerza, con estos bancos centrales dispuestos a todo…

Las expectativas disparadas:

Y si lo comparamos con los precios del ISM:

¿Vuelve la inflación?

Nos encontramos ante la coyuntura más propicia para la inflación desde hace más de 10 años

Los temores de inflación regresan a los mercados de la mano de una recuperación económica cebada por contundentes planes de estímulo monetario y fiscales. Las expectativas de inflación en EEUU están, de hecho, en máximos desde hace bastantes años: en particular, la expectativa de inflación a cinco años (medida como la diferencia entre el tipo de interés del bono a cinco años y el tipo de interés del bono a cinco años indexado a la inflación) se halla en el 2,43%, su mayor nivel desde 2011; asimismo, la expectativa de inflación a 10 años se ubica en el 2,22%, su mayor nivel desde 2014. Y si bien parte de esa subida podría deberse, como argumenta la Reserva Federal, a un incremento de las primas de liquidez (los bonos no indexados son más fácilmente vendibles en los mercados que los bonos indexados), se hace difícil obviar la influencia que en el futuro pueden terminar jugando todos estos estímulos.

De entrada, recordemos que la inflación suele venir provocada por causas monetarias, las cuales derivan de un desequilibrio entre la oferta y la demanda de dinero: ya sea porque la primera aumenta sin que la segunda lo haya hecho o porque la segunda se reduce sin que la primera lo haya hecho. Durante los últimos años, la Reserva Federal llegó a prácticamente quintuplicar la base monetaria, lo que llevó a muchos economistas a pronosticar inflación e incluso hiperinflación: olvidaron, empero, que la demanda de los bancos por esos pasivos monetarios también había crecido en paralelo (las reservas bancarias se incrementaron en casi tres billones de dólares) y que, atascando la base monetaria dentro de las reservas bancarias, su influencia sobre los precios solo podía ejercerse a través de los pasivos bancarios que a su vez poseyeran familias y empresas (aproximados a través de los agregados monetarios de M1 y M2).

Y, en este sentido, tanto la M1 como la M2 se incrementaron de manera bastante menos rotunda: la M1 no llegó a triplicarse entre 2007 y 2019, y la M2 solo se duplicó. Pero ¿por qué los precios no crecieron entre 2007 y 2019 pese a este incremento menos rotundo y aun así apreciable de la oferta monetaria? Por un lado, los precios sí aumentaron en parte: tanto el IPC como el deflactor del PIB crecieron entre 2007 y 2019 cerca de un 22%. Por otro, y como ya hemos señalado, el único factor relevante para determinar la inflación no es la oferta monetaria, sino también la demanda, y la demanda privada absorbió gran parte del incremento de esa oferta.

Una forma relativamente simple de medir la demanda de dinero es a través de la llamada ecuación de Cambridge: la demanda de dinero viene determinada como una fracción del conjunto de rentas de una economía, es decir, de su PIB (la intuición es que los agentes económicos desean mantener en dinero una determinada porción de sus ingresos regulares). En este sentido, la fracción del PIB representada por M1 creció desde el 10% al 18% (en los ochenta y en los noventa, ya había alcanzado en ocasiones el 15%); asimismo, la fracción del PIB representada por M2 pasó del 50% al 70%. En ambos casos, sí, los estadounidenses decidieron mantener más saldos de tesorería en sus carteras, algo no especialmente extraño teniendo en cuenta el clima de bajos tipos de interés experimentados durante la última década: incertidumbre más pocas oportunidades de inversión, igual a bajos tipos de interés y, por tanto, a un reducido coste de oportunidad de mantener el dinero atesorado.

Para que no se genere inflación, la demanda de M1 debería incrementarse estructuralmente desde el 18% al 81%

¿Se repetirá la historia reciente en esta ocasión? Aunque desde luego no es descartable, no habría que precipitarse a la hora de esperar que los hechos se repitan exactamente del mismo modo. Primero, en esta ocasión, la M1 (efectivo en manos del público y depósitos a la vista) se ha más que cuadruplicado en apenas un año: es verdad que esta estadística tiene una trampa y es que ha habido un trasvase desde algunos componentes que se hallaban en M2 a otros que se hallan en M1 (en particular, los bancos han reemplazado depósitos de ahorro, contenidos en M2, a depósitos a la vista, contenidos en M1, por el cambio de la llamada regulación D, que exigía a los bancos mantener reservas contra sus depósitos a la vista). Pero, aun así, M2 también ha crecido a un ritmo anormalmente alto: más de un 25% en apenas un año.

Dicho de otra manera, para que toda esta extraordinaria inyección monetaria no genere inflación a medio plazo, la demanda de M1 debería incrementarse estructuralmente desde el 18% al 81% (si bien este dato está sesgado por el ya mencionado trasvase de componentes de M2 a componentes de M1) y, sobre todo, la demanda de M2 debería aumentar estructuralmente desde el 70% al 88%. ¿Es posible que ello suceda? Sí, aunque dependerá en gran medida de la intensidad de la recuperación y de las oportunidades alternativas de inversión: si durante los próximos años se avecina un crecimiento económico intenso (en parte, por la influencia de la acumulación de estímulos) que eleve las tasas de retorno de las inversiones dentro de EEUU, mantener dinero atesorado será cada vez más caro para familias y para empresas. Más gasto en inversión real se traduciría, vía efecto multiplicador, en más gasto en consumo y, si nos hallamos en presencia de cuellos de botella (como ya le ocurría a EEUU antes de la pandemia o como podrían estar señalando ahora mismo los crecientes precios de las 'commodities'), probablemente en inflación (por efecto de la curva de Phillips).

La clave, como de costumbre, reside en qué vaya a suceder con la demanda de dinero, lo cual a su vez estará muy influido por lo que suceda con las oportunidades de inversión. No obstante, aun cuando la inflación vuelva a entrar en escena, sí conviene matizar qué tipo de inflación no será. Por un lado, no estaremos ante una inflación galopante: las inflaciones galopantes suelen darse por huida en masa de los pasivos estatales, algo que de momento no está sucediendo ni de lejos (si bien el Gobierno de EEUU no debería tentar la suerte de seguir endeudándose sin freno). Por otro, tampoco tendría por qué ser una inflación persistente salvo que venga acompañada de un nuevo ciclo duradero de endeudamiento privado (de hecho, las expectativas de inflación a 30 años solo están, de momento, en máximos desde 2018), de modo que podríamos estar ante un repunte transitorio de los precios como el que viene ambicionando la Fed.

Sea como fuere, nos encontramos ante la coyuntura más propicia para la inflación desde hace más de 10 años.

Abrazos

PD1:No olvides que la gente más feliz no es la que gana más, sino la que da más. Hay más alegría en dar que en recibir. Hay que ser generoso: Pon tu tiempo, tu vida, tus cualidades al servicio de Dios y de los demás. Decídete, atrévete a ser feliz…