¿Qué hacer, gastar dinero público
en la España vaciada, o potenciar los ejes más dinámicos? ¿Qué hacer con las
zonas en declive? Son esas preguntas que se deben hacer los políticos todos los
días, no solo el Gobierno de España, sino también los autonómicos…
El mapa de las regiones productivas de España
La
economía española también se puede representar en un mapa, desde las dinámicas
zonas urbanas hasta las áreas industriales en declive.
Siendo una de las principales potencias europeas, la economía española tiene una distribución territorial que influye poderosamente en otras dinámicas políticas, sociales o culturales.
Tradicionalmente, la geografía económica española estaba dividida
en tres áreas: un norte industrial —sobre todo industria pesada—, un
número variable de núcleos urbanos con cierto dinamismo económico y un
mundo rural dependiente de las actividades del sector primario, sobre todo
agricultura y ganadería. Sin embargo, desde hace unas décadas, estas dinámicas
han comenzado a cambiar.
El norte industrial empezó a perder peso con la llamada reconversión industrial, una exigencia de la Unión Europea para el ingreso español en la
comunidad, que venía agravándose desde las crisis del petróleo en
los setenta. La importante dependencia de estos sectores industriales del
sector público —fuese por ayudas o por ser empresas públicas— llevó a una
privatización y progresivo desmantelamiento de las minas, la siderurgia y los
astilleros que vertebraban buena parte de la economía del norte español, desde
el País Vasco a Galicia.
Parte del relevo de este declive industrial lo tomaron las grandes
zonas urbanas, especialmente Madrid, Barcelona y Bilbao. Estas tres ciudades
han ganado peso como foco de atracción poblacional y de actividad económica,
aunque en muchos casos también haya restado influencia a otras ciudades
importantes y de tamaño medio.
El caso paradigmático probablemente sea el de Madrid. Su
desarrollo ha generado una macrocefalia en buena parte del interior español,
esa llamada España vacía, cada vez más despoblada, más
envejecida y con menor dinamismo económico.
Por otro lado, zonas como el Levante español o el eje del río Ebro
han sabido adaptarse y explotar algunas ventajas económicas que presentaban,
como el turismo y la agroindustria, respectivamente. Precisamente el turismo
también ha sido la manera en la que los territorios insulares, Baleares y
Canarias, han encontrado un modelo económico sostenible que evite la
despoblación y empobrecimiento de estos territorios.
Abrazos
PD: De la misma manera en la cual
Dios nos demuestra su amor gratuito y desinteresado, así nosotros estamos
invitados a expresarlo con los demás. "Amor al prójimo o sacrificios, ¿qué
vale más a los ojos de Dios?"
Estas son 7 maneras sencillas para hacerlo: