30 septiembre 2013

30 septiembre 2013 ¿cómo veo los mercados en el largo plazo?

Después de estar pegado este mes al teléfono hablando con muchos de vosotros (me encantaría hablar con todos así que si tienes un rato llámame), he ido contando a varios las expectativas de los mercados que me gustaría trasladarte, en aras de mi costumbre de tratar por igual al cliente grande que al pequeño. Como siempre, estas líneas son mis opiniones y lo que pienso que podría ocurrir, siendo la posibilidad de que acierte bastante remota… Lo que trato es de ver son los riesgos a corto plazo y las oportunidades de inversión a largo, siendo consciente de que es imposible adivinar el futuro inmediato.
EEUU:
Los mercados han alcanzado nuevos máximos históricos al calor de los continuos estímulos financieros de la FED, que por ahora mantiene, aunque en los próximos 5 años no los podrá mantener, y que ha provocado un problema común en Occidente que bien conocemos aquí.
Deuda Pública acumulada de EEUU en los últimos años:
Desde el inicio de la crisis en 2008, EEUU ha mantenido fuertes déficit haciendo que, aparte de la estimulación de la FED en sus varios QE, duplicara el volumen de deuda acumulada que algún día tendrá que pagar. Aunque por ahora el coste es bajo, dado los mínimos niveles de tipos de interés que mantiene, no es óbice para que los tenga que subir en los próximos años. Es una deuda que le provocará que su capacidad de maniobra en el futuro sea muy limitada. Desde el inicio de la crisis, muchos países han optado por emitir papelitos pensando que de esta forma se salía del paso, pero sin ser conscientes de las repercusiones a futuro que estas decisiones provocarían.
Al igual que aquí, los bancos estadounidenses tienen una parte importante de este pastel de papelitos. Deuda pública en manos de la banca:
Y su déficit anual es terrorífico, sin visos a que se encuentre una salida al mismo. No quieren aplicar tijera, como aquí, y optan por monetizar, imprimir papelitos, por los gastos corrientes, ya que no encuentran ingresos tributarios suficientes para pagarlos:
Hace un año nos salimos de las posiciones de inversión en EEUU, las que teníamos en planes de pensiones, pensando que la subida había sido excesiva y nos equivocamos ya que siguieron subiendo mucho más. Y sin embargo creo que fue acertada esta estrategia ya que hay más riesgos que bondades en Wall Street.
Unión Europea:
Nos está pasando lo mismo. Alemania, el paradigma, anda lleno de deudas:
Y no te quiero cansar con miles de gráficos de otros sitios, pero la tónica ha sido general en la periferia europea, donde, por ejemplo en España, hemos pasado de tener una deuda pública en 2007 del 37% hasta el 95% actual, siendo más que probable que en el futuro inmediato alcancemos niveles muy superiores ya que somos incapaces de reducir el déficit público a menos de 65.000 millones de euros, o un 6,5% del PIB.
Salimos de la recesión pero esto no implica que salgamos de la crisis de deudas que acumulamos. Esta crisis de deudas, de apalancamiento es el origen de la crisis actual que vivimos desde 2008, cuya consecuencia fue una recesión, una etapa de crecimiento negativo del PIB. Pero no se han puesto remedios todavía para reducir la importancia del volumen abismal de deudas que acumulamos. En España la deuda total del Estado, CC.AA., ayuntamientos, empresas, bancos y familias, ronda ya el 400% habiendo subido desde 2008 cuando teníamos un 350% del PIB.
Economías emergentes:
Llevamos dos años con un flujo negativo de inversión a los mercados emergentes debido al continuo machaqueo de noticias negativas que se iban publicando. No quiero entrar al sesgo negativo de toda la información que sale sobre estos países, que se consideran culpables, dentro de la globalización, de que se produzca allí y no aquí… La prensa odia a China y además, esas noticias venden. Y sí, es cierto que han sufrido una cierta burbuja inmobiliaria y de crédito, en parte corregida, y que se ha ralentizado su crecimiento desde el 9% hasta el 7,5%, para rebotar desde el 2Q13.
Pero sigue siendo tanto China como el resto de economías emergentes las locomotoras del mundo…
No debemos olvidarnos los factores que hacen de las economías emergentes su carácter particular. Un país es emergente, como ya lo hicieran otros (Corea del Sur, España en los años 80, EEUU en los 40…) cuando urbanizan el país, emplean muchos recursos y generan mucha actividad en infraestructuras, obtienen mucha inversión directa de otros países que se quieren beneficiar de la mano de obra barata, acaban por crear una clase media consumista que todo lo quiere… En eso están, y es un proceso que dura muchos años…, decenas de años hasta que se completa y entra en problemas, como bien conocemos aquí…
Con todas esas noticias negativas sobre China y otros emergentes, han sido en estos últimos años capaces de aguantar el flujo negativo de inversión en sus mercados de capitales que han sufrido sin bajada de cotizaciones, pero ¿no será ahora al revés y obtendrán un flujo positivo similar al que se alcanzara en los años 2006,2007 y mitad del 2008? Es muy probable que fluya el dinero hacia esas bolsas y eso generará un salto de sus mercados que permitirán salir del letargo por el que se han mantenido en los últimos 5 años… En los próximos 6 meses iremos viendo si esto es así, si hay una recuperación vertical de sus índices y acabamos por obtener esa rentabilidad que no hemos logrado en estos últimos años.
Como te decía el otro día, si te pones en el pellejo de un gran inversor institucional, quizás piensen que mejor que seguir metiendo nuevo dinero en Wall Street, en máximos, prefieran hacerlo en otros mercados que estén más bajos. Y quizás su opción sea en los emergentes ya que la alternativa de los países periféricos europeos no creo que sea oportuna ni por valoración, ni por expectativas…
Otro de los argumentos a favor de las economías emergentes es que si ocurriera de nuevo una subida de la percepción de riesgo y viabilidad de los países desarrollados, como bien podría ocurrir, seguirá siendo la alternativa de emergentes todavía válida como medio de preservar el capital ante lo que pudiera pasar por el mundo desarrollado en los próximos 3 años.
Resumiendo, la inversión en emergentes es la mejor opción tanto a corto plazo como a medio y largo plazo hasta que tengamos visibilidad de la salida de la crisis de deuda del mundo desarrollado.
Un abrazo
PD1: ¿Puede la banca española aparcar toda la deuda que emite el Tesoro? Pues no, está saturada de papelitos y no los quiere ni ver… Mira el Popular:
El Banco Popular ha reducido su cartera de deuda pública en unos 5.000 millones de euros, aproximadamente el 20% del total, con lo que ha vuelto a los niveles que tenía al cierre de 2012. Esta operativa supone reducir el volumen "excepcional" que había alcanzado la cartera dentro de la apuesta decidida de todo el sector por el carry trade para mejorar sus resultados este año. Fuentes del mercado afirman que el banco que preside Ángel Ron se está preparando para los test de estrés, que probablemente penalizarán la deuda de los países periféricos, pero fuentes del banco niegan este extremo y aseguran que se trata de recomponer su estructura de balance tras el proceso de desapalancamiento para prepararse para la salida de la crisis. En todo caso, esta venta puede dar pie a un movimiento generalizado en el sector que pondría en peligro las continuas subastas del Tesoro.
El Popular declaró en sus resultados del primer semestre (ver página 6, cartera de inversión) que sus posiciones en deuda pública se habían incrementado desde 20.220 millones hace un año hasta 25.813 en la actualidad. Y lo que ha hecho ahora el banco es volver a su posición original, que es la que considera que es su cartera estructural a largo plazo. El aumento en 5.000 millones era "excepcional" y pretendía aprovechar la oportunidad de carry trade en los últimos meses para mejorar sus márgenes. Y lo que ha hecho ahora es retornar a la posición "normal".
El carry trade es una operativa a la que han sido muy aficionados todos los bancos europeos para capear la crisis desde que el BCE puso en marcha la barra libre de liquidez. Consiste en tomar prestado el dinero del banco central, inicialmente al 1% y ahora al 0,75% tras la última bajada de tipos, e invertirlo en deuda pública con intereses del 4% o 5% (el bono español a 10 años cerró la semana pasada en el 4,37%) para ganar la diferencia. Así de sencillo y sin mayor esfuerzo.
Pero, por un lado, esta barra libre tiene que acabarse cuanto antes, como reconoció la semana pasada el exconsejero del BCE, José Manuel González Páramo, en el debate organizado por El Confidencial. En este sentido, todos los bancos sanos españoles, Popular incluido, han reducido su apelación al BCE en los últimos trimestres. Y, por otro, las posiciones en deuda pública de los países periféricos probablemente serán penalizadas en los test de estrés que va a realizar el BCE antes de asumir las competencias de supervisión sobre la mayoría de las entidades españolas. Esto ya ocurrió en el ejercicio anterior de la EBA, cuando se aplicó un haircut (recorte) a la valoración de los bonos españoles, portugueses, irlandeses, griesgos e italianos que tenían las entidades en cartera. Ahora los rumores aseguran que los recortes serán mayores tras la quita griega o el rescate de Chipre.
Sin embargo, en el sector hay voces que aseguran que esto sería absurdo porque pondría en peligro las subastas de deuda de estos países, que son asumidas en un 70% por la banca nacional gracias al dinero del BCE. Precisamente, lo que puede pasar si el movimiento del Popular se generaliza en España. Las fuentes consultadas en la entidad niegan que sea esta la razón y la achacan al cambio de balance tras el proceso de desapalancamiento (reducción de la deuda en los mercados) gracias a la mayor captación de depósitos y al recorte del crédito. La mejora de la relación depósitos-créditos permite a la entidad depender menos de la financiación externa y de las operaciones de mercado, y la recperación económica hará que pueda volver a basar su negocio en el crédito.
¿Afectará a los márgenes?
Precisamente, la gran duda en el mercado es si esta reducción del carry trade (que aparece como resultados de operaciones financieras) tendrá un impacto notable en las cuentas del banco. Desde dentro están convencidos de que no; por eso lo han hecho. Desde fuera las cosas están mucho menos claras, puesto que la operativa en deuda pública supone en torno al 20% del beneficio de una entidad en España y todavía la recuperación económica no es suficientemente fuerte para compensarlo con el negocio típico.
Así lo cree el banco de inversión Natixis, que en un reciente informe asegura que el propio Popular ha confirmado esta reducción de la cartera de deuda pública y de su apelación al BCE. Y considera que ello tendrá un impacto relevante en los márgenes, máxime cuando el Popular sigue pagando más que la media del mercado por los depósitos, incluso por encima de los topes impuestos por el Banco de España. 
Por eso, espera que el banco anuncie un giro de 180 grandos en la evolución de sus márgenes, desde el crecimiento del 11,2% intertrimestral del segundo cuarto del año a una nueva recaída. Y eso, a su juicio, decepcionará al mercado, que basaba en buena medida la escalada del 75% que lleva el valor en bolsa desde junio en esta mejoría de los márgenes. Ahora, el valor estará bajo presión hasta que los resultados del tercer trimestre confirman o desmientan el deterioro de los márgenes, a juicio de Natixis.
El Tesoro puede tener un problema muy grave
Finalmente, la otra gran cuestión que abre esta operativa del Popular se refiere a las dificultades que puede encontrar el Tesoro para colocar como hasta ahora sus continuas subastas de deuda para financiar el desbocado déficit público. Si los demás bancos importantes siguen su ejemplo, Luis de Guindos puede verse obligado a pagar mucho más en estas colocaciones para atraer a un inversor mucho menos cómodo que la banca española, lo que a su vez volvería a incrementar la prima de riesgo, lo que elevaría los costes de financiación y el déficit público que, en consecuencia, debería ser financiado con más deudas... un efecto 'bola de nieve', en definitiva.
"Si sólo se trata de la paulatina reducción de la apelación al BCE, el Tesoro lo notará, pero podrá solventarlo, sobre todo porque ahora muchos bancos están sustituyendo la barra libre por las cámaras de compensación privadas. Ahora bien, si es verdad que los test de estrés van a penalizar gravemente la deuda periférica, entonces sí que cabe esperar una salida generalizada para evitar que les obliguen a captar más capital. Y eso sí que sería un problema serio para el Gobierno", explica un experto en este mercado
Y los italianos andan igual:
PD2: Sí a la vida. Incluso en estos casos, que no son más que fuentes de alegría en las familias…

27 septiembre 2013

27 septiembre 2013 Salimos de la recesión, pero no de la crisis de deuda

Hoy te lo explica un gran economista mejor que yo:
Todo indica que la economía española ha dejado de caer: el consumo parece que aumenta y está ahora a niveles de 2005 y se sitúan un 10,5% por debajo de lo que estuvieron en su momento máximo en 2007. La inversión fuera de la construcción empieza a subir aunque no compensa la caída de la inversión inmobiliaria. El paro de los últimos meses se ha reducido. Está por ver si se trata de un factor cíclico asociado a la temporada turística estival o es un fenómeno permanente (el mercado laboral es un indicador “retrasado” -”lagging indicator”- de lo que pasa en la economía: es decir, es el último en mejorar). Las exportaciones aumentan y el déficit comercial casi se ha cerrado. Eso es un hito sobre todo teniendo en cuenta que el déficit era del 10% justo antes de empezar la recesión. Es decir, la economía española ha hecho un ajuste de unos 100.000 millones de euros. Una parte importante ha sido causada por la caída de las importaciones (al empobrecerse, los españoles han comprado menos productos extranjeros como petróleo o BMWs) pero en parte ha habido una subida real de las exportaciones.
Además de todo esto, parece que los grandes cataclismos a los que nos enfrentábamos hace un año no se han producido: Grecia no ha quebrado, el euro no se ha desintegrado, el precipicio fiscal en EEUU no se ha materializado, la guerra entre Irán e Israel por el desarrollo del programa nuclear del primero no ha existido y, por consiguiente, los precios del petróleo no se han doblado.
Por lo tanto, insisto, todo indica que la caída se ha frenado y el cataclismo se ha evitado. Y es muy posible que los próximos datos del PIB ya no muestren un crecimiento negativo sino nulo o quizá positivo.
Pero una cosa es que hayas dejado de caer y otra muy distinta que empieces a crecer a un ritmo que te permita volver pronto a los niveles de prosperidad que tenías antes de la crisis. Es decir, una cosa es que el PIB dibuje una “V” (una vez la economía toca fondo, empieza a crecer rápidamente) y otra que dibuje una “L”, que se quede estancada en el fondo como les pasó a los países latinoamericanos después de su crisis financiera en los años ochenta o a Japón después de la implosión de su burbuja inmobiliaria en los noventa.
Hay algunas razones para ser optimista: por un lado, existe una demanda “reprimida” o “pendiente” de bienes de consumo e inversión que se puede materializar en cualquier momento (familias que están esperando a que se acabe la crisis para comprar el coche o la nevera nueva y empresas que están esperando a renovar su maquinaria). Eso puede disparar el PIB y generar un nuevo optimismo que haga rebotar a la economía. Por otro lado, la Unión Europea está poniendo orden al sector bancario y eso puede conllevar un aumento del crédito a las pequeñas empresas españolas.
El problema es que también existen algunas razones para ser pesimista. Primero, el crédito sigue sin fluir a las PYMES y sin crédito no se va a salir de la crisis. Como he dicho, es posible que la UE arregle pronto este problema, pero también es posible que, como pasa tan a menudo en la UE, la cosa se estanque en discusiones interminables que no llevan a ninguna parte. Segundo, el problema del “segundo tsunami” de la morosidad que afecta a la banca española y que puede hacer quebrar a alguno de los bancos que hasta ahora no han quebrado y han pasado todos los stress tests. El primer tsunami fue la quiebra de las empresas inmobiliarias y constructoras, un tsunami que se llevó por delante a todas las cajas de ahorros que tuvieron que fusionarse o convertirse en bancos. El segundo tsunami que ya anunciamos aquí en 2010 es el del impago de créditos e hipotecas por parte de familias que han perdido su empleo o pequeñas y medianas empresas que han tenido que cerrar. Este nuevo tsunami todavía puede causar estragos a un sistema bancario que no se ha recuperado del primer envite.
La tercera razón para ser pesimista es que la situación fiscal del estado sigue siendo un freno a la economía: los recortes de gasto y los elevados impuestos ahuyentan la actividad económica. Cuarta, el deterioro institucional que va desde la casa real hasta Isabel Pantoja pasando por la corrupción de los partidos políticos, los jueces, los empresarios, los banqueros y los reguladores, están absolutamente desprestigiados. La “marca España” se ha convertido más en un chiste de mal gusto que en una herramienta que pueda ayudar a la economía a salir de la crisis a través de la inversión extranjera.
Quinta, la política monetaria europea no tiene perspectivas de ser favorable a España. Mientras los países del norte vayan bien, la política monetaria seguirá siendo menos laxa de lo que le interesa a la economía española.
Sexta, las reformas estructurales van lentas o no van. En particular, la reforma educativa de Wert ha sido un insulto a la inteligencia: mientras el mundo se debate sobre como cambiar la filosofía educativa, sobre incorporar las nuevas tecnologías y los MOOCS a las aulas, sobre cuál es el papel del profesor en un mundo tecnológicamente avanzado y globalizado, España debate sobre si la “religión cuenta para la media” o sobre “si la nota de corte para las becas tiene que ser del 6,5 o 5,5”. Mientras tanto, los jóvenes que salen del sistema educativo y tienen que competir con Coreanos, Chinos, Finlandeses o Norteamericanos, tienen una tasa de paro que supera el 50%. Ese es el fracaso escolar.
Séptima, la recuperación española se está basando en la exportación. Pero ésta se concentra en las grandes empresas y depende crucialmente de que el resto del mundo vaya bien. En las últimas semanas, las economías emergentes han empezado a entrar en crisis y esto puede poner en peligro la incipiente recuperación española.
Y finalmente está el “tapering”. El presidente de la Reserva Federal norteamericana ha anunciado que pronto va a haber una reducción paulatina (“tapering”) de la expansión monetaria. Eso va a implicar tipos de interés más elevados en todo el mundo. Y los países, familias y empresas que tienen deudas elevadas van a sufrir. La deuda pública española se ha doblado durante la crisis y se acerca al 100% del PIB. Una subida de tipos tendrá un efecto riqueza negativo con consecuencias potencialmente catastróficas. Al fin y al cabo, recordad que la crisis de la deuda de los años ochenta fue causada porque Ronald Reagan subió los tipos de interés en Estados Unidos y eso causó una subida de tipos en todo el mundo. Los países endeudados de América Latina quebraron uno tras otro y tardaron 25 años en recuperarse.
Poco a poco, los ciudadanos de a pie comienzan a notar que las cosas mejoran un poquito. Y los que no lo notan ahora, pronto lo notarán. Las pequeñas empresas están viendo y verán aumentos en sus ventas. Los autónomos reciben y recibirán más encargos. Algunos trabajadores en el paro (pocos) reciben y recibirán ofertas de empleo. Y a medida que se materialice la demanda reprimida habrá más compras, más actividad y más ciudadanos que noten la mejora. Pero que nadie saque el cava para celebrar. Sobre todo que no lo saquen esos ministros que se apresuran a decir que salen los brotes verdes. Porque esta mejora puede ser un fenómeno pasajero. Una calma antes de la segunda parte de la tormenta. Recordad que en 2010 también parecía que la cosa volvía a la normalidad y la recaída de 2011 fue peor que el primer tsunami de 2008. La economía española es muy frágil y cualquier viento de cara (y he explicado siete factores que pueden causar viento de cara) puede ocasionar una nueva recaída. De momento, sin embargo, sí que podemos afirmar que España (o al menos su economía) ha dejado de ir hacia atrás.
Abrazos,
PD1: ¡Qué cantidad de enfados! En las familias, sobre todo por herencias y celos; entre amigos, por chuminadas; en el trabajo, por envidias, por haber hecho mal las cosas… Y simplemente hay que pedir perdón, ser perdonado y borrarlo de la cabeza. Casi siempre uno tiene la culpa sin que nos hayamos dado cuenta. Vas conduciendo y te pitan airadamente…, y suele ser siempre nuestra culpa: distracción, mal hacer, o lo que sea… No podemos salir rebotados después de cada enfado. Se pide perdón y se intenta no repetirlo. ¿Cuántas veces rezamos el Padrenuestro diciendo: “perdónanos las ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos ofenden…”? Pues eso.

26 septiembre 2013

26 septiembre 2013 Más cosas de la banca española

Más pressing para que sean más trasparentes y provisionen… Hasta obligan a los bancos a que reconozcan lo que han refinanciado a El Corte Inglés… ¡Te cagas lorito!

El BdE obliga a la banca a provisionar las refinanciaciones de las grandes empresas

El supervisor ha endurecido las exigencias sobre refinanciaciones para aflorar toda la mora oculta pertenecientes a las grandes firmas. Sólo la operación de El Corte Inglés se traduce en una bolsa de provisiones para el sector de más de 600 millones.
La banca conocerá, en las próximas semanas, a cuánto ascenderá lafactura del ejercicio de reclasificación de los créditos refinanciados impuesto por el Banco de España. Un volumen de provisiones que podría superar los 10.000 millones para el sector, cifra defendida incluso por el propio ministro Luis de Guindos, ante la última vuelta de tuerca del organismo que preside Luis Linde. El supervisor ha obligado a las entidades a clasificar como dudosos todos los préstamos de las grandes empresas que han sido refinanciados más de dos veces o que tengan períodos de carencia superior a 24 meses. Así, por ejemplo, sólo la refinanciación de El Corte Inglés obligará aSantander, BBVA, Bankia, Caixabank, Sabadell, Popular oBankinter, la principal banca acreedora, a dotar unas provisiones en el entorno de los 600 millones, según fuentes del sector.
"El Banco de España ha tomado esta medida para que el sector aflore toda la posible mora oculta que puede haber en la financiación a las grandes compañías. Quiere tener una verdadera foto para no llevarse ninguna sorpresa en las pruebas del próximo año que realizarán tanto la EBA como el BCE", explica un alto directivo de una entidad.
Todas las entidades han tenido que rehacer el informe inicial, que seguía unas directrices menos exigentes. De hecho, la primera circular enviada por el supervisor a las entidades sólo obligaba a la reclasificación de los créditos refinanciados de particulares y pymes. Se dejó fuera del ejercicio las famosas 'patadas a seguir' de la banca a las grandes empresas para evitar mayores necesidades de capital al conjunto de la banca.
Sin embargo, el Banco de España ha decidido incluirlo finalmente ante las exigencias regulatorias y de capital que implicará todo el proceso de supervisión bancaria única. Por esta razón, el supervisor ha decidido que las entidades reclasifiquen como dudosos todas las operaciones refinanciadas o reestructuradas con períodos de carencia de amortización de capital de 24 meses o más, así como las operaciones no vencidas que hayan sufrido dos o más refinanciaciones.
La mayor parte de los créditos empresariales sindicados tendrá que reclasificarse por parte de la banca para considerarlo como dudosos
En esta situación se encuentran la mayor parte de los préstamos sindicados empresariales a los que la banca ha ido ampliando plazos de carencia en los últimos ejercicios. Además de la reciente refinanciación deEl Corte Inglés, operación que deja a la banca el control sobre importantes decisiones como el reparto de dividendo, se encuentran en esta situación empresas como Ferrovial, Prisa, Cortefiel, NH, Sol Melián, San José o Telepizza.
En el informe que ha preparado cada entidad, y que la gran mayoría ya ha enviado al Banco de España, cada banco ha comunicado el volumen total de provisiones a realizar con esta nueva exigencia. Pese a que la fecha límite marcada por el supervisor expira el próximo 30 de septiembre, no será hasta unos días después cuando cada entidad conozca la cifra definitiva tras los ajustes que efectúen se efectúen en Cibeles.
El supervisor ha tomado esta medida ante la sospecha de que las entidades utilizan estas reestructuraciones para evitar la entrada en mora de operaciones que son claramente inviables.De hecho, las sospechas del Banco de España es que el gran foco de la mora oculta de la banca española se esconde en su bolsa de 88.270 millones de créditos refinanciados normales, es decir, que aún están al corriente de pago.
De hecho, para que un préstamo refinanciado pueda seguir considerado como normal tendrá que cumplir unas duras exigencias que hagan altamente probable la recuperación de todos los importes debidos. Para ello se tomarán en consideración factores tales como la inexistencia de un dilatado periodo de carencia, cuotas mensuales que no superen un porcentaje significativo de los ingresos recurrentes en el caso de los particulares o la adición de nuevos avalistas de indudable solvencia o de nuevas garantías eficaces".
Por el contrario, se convertirán de "subestándar" a "dudosos" (una definición que indica que la deuda será difícilmente recuperable y por tanto exige a cambio más provisiones) todos los créditos en los que "se evidencie acusada debilidad en la capacidad de pago del prestatario". Factores tales como "la existencia de garantías eficaces, el otorgamiento de periodos de carencia en la amortización del capital superiores a 30 meses, o la procedencia de refinanciaciones o reestructuraciones previas", especifica el supervisor.
Los datos del supervisor, recogidos en el Informe de Estabilidad Financiera de mayo, cifran en 208.206 millones el nivel de préstamos refinanciados por la banca española al cierre del pasado ejercicio, un 13,6% del crédito al sector privado residente. De ellos, el 42,4% (88.270 millones) está clasificado como normal por las entidades, mientras que un 20,6% (42.890 millones) es subestándar y el 37% (77.036 millones) restante, como dudoso. En total, casi 120.000 millones (concretamente, 119.926 millones) están con problemas de pago.
Abrazos,
PD1: Lo más horrible que he visto yo de los matrimonios es cuando se acaba el cariño, cuando no se saben qué contar… He visto a muchos matrimonios hacer el: El método “pimpán” y no me gusta. Si no eres capaz de hacer reír a tu mujer, apaga y vámonos. Cuesta la rutina, cuestan las viejas heridas, pero si no se intenta es una convivencia atroz:
El método Pimpán³ lo practican matrimonios maduros, de esos que ya tienen a los hijos emancipados, y que en los fines de semana aprovechan su nueva independencia para darse algunas alegrías gastronómicas. Para practicar el método Pimpán³ hay que comer en absoluto silencio, hasta el punto de que el único sonido que se escucha sobre la mesa es el chocar de los cubiertos contra la fuente de la comida al servir.
Son parejas campesinas que ya se tienen tanta confianza que no necesitan hablar para llenar espacios huecos en esa mesa, porque no los perciben así. Así que la parte clave del método es el silencio: ese silencio que a mí se haría intolerable durante una comida entera pero que en los practicantes del método es de lo más natural. Sólo se interrumpe, por cierto, en el momento del café y los licores, en los cuales la pareja intercambia unas cuantas frases: me imagino que son pareceres sobre el banquete y estimaciones más o menos ciertas de la cuenta.
Cocido gallego (Juantiagues / Flickr).
La otra característica del método Pimpán³ es la completa compenetración entre los dos comensales, su ritmo deglutorio y masticador, la precisión suiza en la transferencia de comida entre la fuente al plato. De ahí viene el pimpán-pimpán, un toma y daca rápido “para ti y para mí”Uno tras otra, alternándose disciplinadamente, atacan a la fuente de forma frontal y lateral, sin piedad ni asomo de duda. Y aquí no observamos la educación burguesa de uno servir a la otra, ni la sumisión doméstica de la otra sirviendo al uno. Para nada: en estas parejas, cada uno va a lo suyo, pero de forma coordinada.
Aunque hay otra forma de demostrarse cariño: el mayor ejemplo de coordinación está en que son tan conscientes de los gustos de los otros, que se sirven de la fuente dejándole al otro las piezas favoritas. Que si te gusta la costra del arroz, yo iré entrando hacia el centro. Que si te van los muslos de pollo, yo me decanto por las pechugas.
Lo último que define estos banquetes silenciosos es la ausencia de tregua. De forma rápida, el matrimonio aborda con profesionalidad una fuente de cocido de esa altura conocida como “poner los chorizos de pie”. Y mientras nosotros, aún pareja novata en el método, claudicamos cuando la bandeja todavía parece intocada, los pimpanistasavanzarán sin miedo hasta el final, dando cuenta de toda la bandeja de lacón, costillas, morros, orejas, cacheira, falda, chorizos, muslos de pollo, patatas, habas y grelos en poco tiempo más del que nosotros empleamos para abandonar el partido en el descanso.
El restaurante estará al final lleno de esas voces cargadas por el vino, las gotas servidas al café y los licores de la casa. Pero el matrimonio de pimpanistas, sin muestras de cariño aparente entre ellos, sin necesidad de mirarse pero juntos y amorosos hasta el final de sus días,  ya pensarán en el siguiente reto gastronómico, en la primavera que no tardará en llegar.

25 septiembre 2013

25septiembre 2013 Flujo de fondos hacia mercados emergentes

Parece que hay flujo de nuevo hacia las economías emergentes. No han funcionado sus mercados de valores en el pasado. Llevan cinco años laterales donde apenas se ha ganado dinero. Y sin embargo, de nuevo, con unos mercados estadounidenses en máximos históricos, hay flujo para invertir en emergentes. Eso es lo que se está percibiendo desde agosto pasado. Ponte tu en el pellejo de un gran inversor yanqui: ¿qué alternativas tiene con esa liquidez nueva que le generan los estímulos de la FED? ¿Seguir invirtiendo en Wall Street en máximos históricos, o dejar que fluya la inversión a alternativas más baratas? Pues eso. Quizás veamos en los próximos meses un flujo de una zona a otra, una salida de donde anda caro para reconducirlo a emergentes otra vez. Esperemos sea cierto:

Mercados emergentes: “Los inversores que esperen demasiado perderán su oportunidad”

J.P.MORGAN AM: “LA HISTORIA NOS DICE QUE EL PESIMISMO ES UNA SEÑAL DE COMPRA”

Según Richard Titherington, director de inversiones y responsable de renta variable emergente de J.P.Morgan AM, la caída de las valoraciones y las expectativas de beneficios generan una fuerte señal de compra.

Desde las protestas populares de Brasil o Turquía por la fuerte depreciación de las monedas de mercados con déficits por cuenta corriente, el verano ha estado plagado de malas noticias sobre las economías emergentes. Las bolsas, sin embargo, parecen estar experimentado un cambio. Desde que tocase mínimos el pasado 24 de junio, el índice MSCI Emerging Markets ha generado una rentabilidad del 13,2%, un 3% más que los mercados desarrollados. Esta mayor rentabilidad se ha intensificado en las últimas semanas. “Parece que se vuelve a cumplir la máxima de que los mercados emergentes se recuperan antes que los beneficios y antes que las economías. Los inversores que esperen demasiado podrían dejar pasar la oportunidad”,asegura Titherington, director de inversiones y responsable de renta variable emergente de J.P.Morgan AMen el último informe de Investment Insights publicado por la entidad.
“La historia nos dice que el pesimismo es una señal de compra”. El experto recuerda que los mercados emergentes son más recientes y más volátiles que los desarrollados y exhiben una mayor cicliclidad y dispersión de rentabilidades. “Es lo normal. El optimismo de los inversores internacionales (que se refleja en las valoraciones) aumenta conforme mejoran los beneficios y las rentabilidades y disminuye conforme empeoran. Por eso, cuando el mercado alcanza su punto álgido, la renta variable de mercados emergentes parece ofrecer elevadas rentabilidades de los recursos propios (ROE) y un fuerte crecimiento de los beneficios con bajo riesgo y cuando el mercado toca fondo, sucede lo contrario: las ROE caen, los beneficios decepcionan y el pesimismo se extiende entre los inversores”, explica.
Para Titherington, la caída de las valoraciones y las expectativas de beneficios generan una fuerte señal de compra. “Si espera certidumbre, perderá su oportunidad”, afirma. Tal y como defiendo el experto de J.P.Morgan AM, dados los elevados niveles de volatilidad y dispersión de rentabilidades que registra la renta variable de mercados emergentes, los inversores deberían ser prudentes y reducir su exposición a la clase de activos cuando las valoraciones marquen máximos históricos y, al contrario, aumentar su exposición cuando las valoraciones toquen mínimos. “Tradicionalmente, una valoración superior a 2,5 veces la ratio precio-valor se considera una señal de venta y una valoración inferior a 1,5 veces P/VC, una señal de compra. La ratio precio-valor contable señala una oportunidad de compra para los inversores de medio y largo plazo”.
¿En qué punto nos encontramos ahora mismo?
Las ROE han caído y los beneficios siguen decepcionando, el pesimismo está extendido y las valoraciones son inferiores a 1,5 veces P/VC, pese al reciente rally. La pregunta ahora es… ¿pueden caer más las valoraciones? ¿Pueden caer las divisas por debajo de su valor razonable de mercado? “Sí, podrían, pero en las circunstancias actuales una clase de activos cíclica con una elevada volatilidad representa una oportunidad de compra para los inversores con un horizonte de inversión de entre uno y tres años y una oportunidad de venta solo para aquellos con un horizonte de inversión de entre tres y seis meses”.
Para Titherington, la historia nos enseña que la renta variable rebota antes de que se registre una recuperación del crecimiento y los beneficios y el rally vivido en los últimos meses nos lleva a pensar que esta vieja máxima volverá a cumplirse. “Los inversores que esperen a una recuperación sólida de los beneficios y el crecimiento se exponen a dejar pasar gran parte de las ganancias que caracterizan el perfil de rentabilidad a largo plazo de una clase de activos cíclica como es la renta variable de mercados emergentes”.
Abrazos,
PD1: Poca generosidad…
Hemos sido más educados para la exigencia que para la generosidad, más para la reivindicación que para la cooperación. Protestamos por todo, hacemos valer nuestros derechos…, pero damos poco a cambio, lo pedimos todo y no damos nada… Y lo queremos para ya, de inmediato…

24 septiembre 2013

24 septiembre 2013 "se vende"

Interesantes artículos en Cincodias sobre el mercado inmobiliario:

Se vende “Se Vende”

¿Brotes verdes en el sector inmobiliario? Me temo que mucha contabilidad creativa y aún mayores ganas de pregonar el cambio de tendencia con la llegada de los grandes inversores internacionales.
Se anuncian operaciones a bombo y platillo. Lo curioso del asunto es que salvo alguna excepción (VPOs en renta de Madrid), no se materializa inversión alguna en inmuebles. De hecho se podría extraer la conclusión contraria, persiste una notoria prevención a inmovilizar grandes recursos en bienes raíces en España, con la excepción de la adquisición de activos prime por parte fundamentalmente de inversores patrimonialistas y family offices.
Esto viene a cuenta de las dos adquisiciones protagonizadas por sendos fondos de inversión internacionales de los brazos inmobiliarios de BANKIA-BFA (Bankia Habitat) y CAIXA BANK (Servihabitat). Una operación, la primera, parece que cerrada; y la otra en ciernes. Pues bien, ni Cerberus ni TPG han adquirido, ni se proponen adquirir, un solo inmueble. Tampoco activo financiero alguno con subyacente inmobiliario (préstamo o crédito hipotecario). Están realizando inversiones en plataformas de servicios de intermediación, compraventa y gestión de inmuebles.
En realidad, lo que están comprando son meros contratos de gestión en exclusiva con los vendedores. Así, la Entidad financiera cede la “rama de actividad” de gestión inmobiliaria con sus activos y pasivos (personal, medios materiales, y fondo de comercio). Se vende, en el fondo, y se valora y paga, el negocio que venga de la exclusiva del contrato con la entidad financiera vendedora. Ese negocio tiene dos fuentes: los propios activos adjudicados ya en cartera de las entidades financieras vendedoras, que no se traspasan al inversor, pero que deberán ser gestionados con una vocación de realización inmediata; y la cesión, subrogación o subcontratación por la entidad financiera vendedora de los servicios objeto de los contratos de gestión de los activos inmobiliarios físicos y financieros transmitidos a SAREB (en el caso de las entidades de Grupo 1 y 2, como Bankia o Catalunya Banc). En fin, puro outsourcing de backoffice al estilo del que nos tenían acostumbrados Accenture, KPMG y asimilados.
En efecto, no imagino a las Entidades cediendo la gestión de su riesgo inmobiliario a una sociedad controlada por un fondo internacional, cuando su prioridad sigue siendo hoy la gestión del impacto de los quebrantos fundamentalmente inmobiliarios en su balance. Cuándo y cómo “matar” riesgo inmobiliario en balance entra prácticamente en el núcleo de la gestión estratégica de la entidad. ¿O es que alguien se cree que un fondo va a dictar cuándo la entidad refinancia o se adjudica un activo? O lo que es aún más sensible, a qué precio y en qué condiciones lo hace.
Una de las peleas más recurrentes de los últimos años ha tenido lugar precisamente entre los brazos financieros e inmobiliarios de las Entidades a la hora de fijar los términos de las adjudicaciones de activos, pues el precio de entrada en el perímetro de la inmobiliaria determinaba directamente cuanto “dolor” asumía cada una de las “hermanas”. A mayor valor de adjudicación, menor quebranto en el balance de la entidad financiera, pero mayor riesgo para la inmobiliaria de materializar pérdidas posteriores en la desinversión y, en último extremo, mayor dificultad para ejecutarla en mercado, con el consiguiente incumplimiento de los objetivos de colocación de activos.
La cuestión reside, entonces, en desentrañar las razones por las que a los fondos les parece ahora atractivo entrar en el negocio de los APIs a gran escala. Por las “magníficas” condiciones y largo plazo de los contratos con SAREB (caso de Bankia y Catalunya Banc) no será.

Se Vende “Se Vende” (y 2)

Dejábamos abierto el último post invitando a desentrañar el furor con el que, repentinamente, algunos fondos oportunistas habrían despertado a su tardía vocación de APIs. MOB  around the table lo clava en su comentario, en lo que a las motivaciones de la banca y los beneficios para la misma concierne. También en lo de ganar el sitio en un mercado “prometedor” de transacciones sobre activos, si bien el horizonte temporal de estos inversores dudo que llegue a la década. De cinco años difícilmente pasa.
Hoy pretendo dar mi personalísima interpretación de lo que está pasando en el mercadeo de las finanzas del ladrillo, o del ladrillo de las finanzas, que tanto monta. Vaya por delante que me temo que mis queridos críticos me echarán en cara que la entrada de hoy es larga y difícilmente inteligible.
Lo del mercado institucional de APIs, prolegómeno de un buid-up en toda regla que veremos más pronto que tarde (pases de segunda ronda), se erige en el penúltimo paso de la “transformación” del mercado inmobiliario español post-crisis. A este sí que no lo va a reconocer ni la madre que lo parió. El título de la película (como en el chiste) podría ser: “de la fragmentación al oligopolio”. Eso sí, pasando en el camino por los presupuestos generales del Estado, saneamientos a costa del contribuyente incluidos.
En efecto, el unbundling de plataformas de gestión de activos inmobiliarios (físicos y financieros) se erige en presupuesto para el movimiento en bloque de carteras hacia inversores institucionales (fondos et alii) que no cuentan con estructura de gestión propia.  La Banca creó o desarrolló esos APIs internamente bien porque quiso participar en el festín de la burbuja a título principal (caso de las extintas cajas), bien porque no le quedaron más bemoles al tragarse, con el estallido, montones de daciones en pago de créditos promotor fallidos, que dejaron de ser activos financieros para convertirse en activos físicos. La “desvirtualización” que dicen algunos en Twitter.
La salida en bloque a cliente no finalista (inversor financiero no patrimonialista) de activos dacionados e incluso de riesgo financiero desde los balances de la Banca requiere de plataformas “independientes” de gestión de esos activos, y hace además redundantes las propias de la Banca, al hilo de la limpieza de balances en curso. Ya saben, la famosa jibarización de los APRs (activos ponderados por riesgo) y su beneficioso impacto en la ratio de solvencia (MOU, Basilea III, etc.).
Con el estallido de la burbuja y su corolario de desaparición por KO del promotor no bancario y de barrido de las Cajas, se produjo una concentración sin precedentes de la oferta inmobiliaria. Hoy cinco entidades financieras y SAREB la copan. Ya comentamos en este mismo espacio que SAREB no es otra cosa que un enorme cártel de crisis, dirigido a sustraer del mercado una parte importante de la oferta (la procedente de las cajas quebradas) y regular su salida, controlado por el resto de oligopolistas, que son junto al Estado sus accionistas.
Es cierto, no obstante, que el mercado de segunda mano está en manos de propietarios independientes, pero por su dispersión y fragmentación difícilmente puede tener un impacto en la formación de precios minoristas.
Es en  la formación de precios donde está “la madre del cordero”. Y ahí confluyen plataformas, inversores y Banca.
¿No les resulta extraño que coincidiendo con el publicitado apetito inversor de los fondos extranjeros hayan aparecido esta semana recurrentes noticias sobre que el precio del ladrillo ha tocado suelo, e incluso repunta levemente en algunas áreas?  También esto a mi juicio tiene una clara explicación. En la próxima entrega, “más” y espero que “mejor”.
Abrazos,
PD1: ¿Cómo se van a poder financiar los países quebrados? ¿Cuánta pasta les vamos a tener que dar más? A partir de ahora, después de las elecciones alemanas, toca retratarse de nuevo… ¿Hay voluntad de seguir bombeando dinero para ellos? ¿Querrán los contribuyentes del Norte? Deben andar hartos… El BCE ha dicho que en breves va a soltar otra burrada de millones a los bancos. Pero los bancos andan devolviendo la pasta ya que no les piden créditos las PYMES y no quieren comprar más papelitos del Estado… Y no hay visos de Eurobonos, Merkel lo dejó muy claro… Entonces, ¿será parecido a lo que hacen los yanquis?
Apenas un día después de las elecciones en Alemania, la prensa económica internacional vuelve a poner sobre la mesa la necesidad del segundo rescate a Portugal y el tercero a Grecia ("Portugal Could Be Cooking Up a Storm; Greece, Talks on New Bailout"). Ambos problemas no son nuevos, pero habían quedado orillados hasta la celebración de los comicios teutones.
Una vez despejado el panorama electoral, y tras la clara victoria de Angela Merkel, las autoridades alemanas no tardarán en dar a conocer su posición sobre las condiciones y consecuencias de las nuevas ayudas a ambos países.
El rescate acordado con Portugal en 2011 vence el próximo año. A partir de ese momento, debería ser capaz de financiarse en el mercado mediante la emisión bonos del Estado portugués. Con los tipos de interés a diez años actualmente por encima del 7%, dicha posibilidad es una quimera. Portugal tiene vencimientos de bonos públicos en 2014 por importe superior a 18.000 millones de euros. Las necesidades estimadas para el periodo 2014-2017 ascienden a 54.000 millones de euros. Si Portugal no puede financiarse por sí misma, alguien tendrá que poner el dinero. Las posibilidades son diversas, pudiéndose emplear varias de ellas simultáneamente.
- El BCE podría poner en marcha el primer programa OMT de compra de bonos en el mercado secundario. Esta posibilidad no es realista. Para que dicho programa se ponga en funcionamiento es condición necesaria que el país en cuestión tenga acceso a los mercados de emisión, algo que actualmente no ocurre con Portugal.
- Los acreedores 'oficiales' (BCE, FMI y fondos de rescate europeos), podrían prolongar el vencimiento de los préstamos actuales y reducir la carga de intereses. Pese a la previsible oposición inicial del BCE, hay que recordar el antecedente del canje del promissory note irlandés con vencimiento inferior a diez años y 8% de tipo de interés por un bono de nueva emisión de vida media 32 años y un 3% de tipo de interés.
- Aplicación de una quita a los inversores privados, como ya se hizo con los bonos griegos. Es la última opción, por las consecuencias de inestabilidad y posible miedo de contagio a otros países como Italia o España. Los bancos portugueses tienen invertida en bonos lusos una cantidad superior al 100% de sus recursos propios. Cualquier quita aplicada implicaría una necesaria recapitalización de los bancos y asunción de pérdidas por parte de los acreedores bancarios. Huelga mencionar el efecto que tendría sobre determinados bancos españoles.
- Nuevos préstamos a Portugal a través de líneas de créditos preventivas (precautionary credit line) del fondo de rescate europeo conocido como MEDE. Dichas ayudas deben ser aprobadas por unanimidad por todos los países integrantes del euro. 
Portugal acabará este año con un nivel de deuda sobre el PIB del 124%. Sus previsiones de crecimiento no son nada halagüeñas. Por tanto, no hay que esperar que dicha ratio se reduzca por aumento del denominador. Además, las nuevas ayudas al país luso, si no asociadas a quitas, implicarían un incremento del ratio de deuda. Son entendibles las dudas sobre la sostenibilidad de su nivel de deuda.
En el caso griego no todo son malas noticias. Por un lado, se espera que este año logre por primera vez desde el inicio de la crisis un superávit primario en sus cuentas públicas (sin contar la carga de intereses), lo que podría facilitar las negociaciones con sus acreedores para un tercer rescate. Se estima que Grecia necesitará préstamos por 11.000 millones de euros adicionales a los 240.000 millones ya aprobados en los dos primeros rescates. La cantidad es reducida, en comparación con lo ya acordado, pero una vez más supone añadir más deuda pública a un nivel difícilmente sostenible a largo plazo (160% del PIB al primer trimestre de 2013).
No tardaremos en conocer cuál es la 'nueva' posición de Alemania sobre ambas situaciones. Visto el aval recibido por Merkel a su gestión el pasado domingo, no hay que esperar una suavización de la posición alemana. La gran pregunta ahora es quién pondrá el dinero necesario para ambos países: ¿los acreedores, públicos y/o privados?, ¿los estados directamente o través de los fondos de rescate europeos siendo Alemania el mayor contribuyente?, ¿o será el BCE?
En escasas semanas saldremos de dudas. Sea cual sea la solución, inevitablemente generará momentos de tensión. La volatilidad parece asegurada.
PD2: Este domingo pasado celebramos nuestras bodas de plata: ¡25 años de casados ya! Tuvimos a la familia de comilitona en casa y luego celebramos una Misa de Acción de Gracias. Me había preparado unas palabras de agradecimiento a mi mujer, hijos, padres/suegros, hermanos y cuñadas y sobrinos…Pero se acabó la Misa y no me atreví… Pensé que restaba protagonismo a los demás y que reclamaba el mío propio indebidamente. Además, todo lo que iba a contar ya lo sabe mi “doña” muy bien… Y lo saben mis hijos y el resto también…
Claro que sigo tan enamorado de ella como cuando era novio, claro que he disfrutado de la vida con ella, con los problemas y las satisfacciones, claro que sigue siendo mi media naranja y que la sigo queriendo con toda mi alma. Son esas cosas que si se las cuentas se echa a llorar y que hay que ir diciéndoselas día a día, con cariño y ternura, no cuando son los aniversarios solamente…