Lo puedes cobrar como forma de capital, en forma de renta, o te lo puedes quedar para complementar tu jubilación…
¿Heredas un plan de pensiones? Éstas son tus alternativas
Lo primero que debes saber es que un plan de pensiones permite designar un beneficiario concreto en caso de fallecimiento, que será la persona que cobre el plan. Si no se ha designado ninguno, lo cobrarán los herederos legales en el siguiente orden: cónyuge no separado legalmente, hijos, padres y otros herederos.
En este sentido, el plan de pensiones no forma parte de la masa hereditaria ni tiene por qué figurar en el testamento, ya que cuenta con su propio mecanismo en caso de fallecimiento del partícipe. Además, el dinero que cobres tampoco tributará en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, si no que lo hará en la declaración de la renta, como veremos más adelante.
Qué hacer con el plan de pensiones de una herencia
Ahora que ya tienes claro quién percibirá el dinero del plan de pensiones llega el momento de ver qué hacer con él. En contra de la creencia habitual no hay por qué rescatar el plan de pensiones de forma inmediata, ni mucho menos. Es más, la mayoría de bancos intentarán que conserves el plan e incluso que sigas realizando aportaciones.
¿Y si hay más de un heredero? En caso de que el cónyuge hubiese fallecido y haya varios hijos, el capital del plan se repartirá a partes iguales, tal y como también ocurre con los fondos de inversión.
Si decides cobrar el dinero del plan
En caso de optar por cobrar el dinero del plan de pensiones heredado, habrá que tributar por él en la declaración de la renta tal y como lo haríamos en caso de un plan de pensiones propio.
Los planes de pensiones forman parte de las rentas del trabajo y por eso el dinero que rescates se sumará a lo que hayas ganado ese año con tu salario. No se trata de una cuestión Baladí, ya que si la cuantía del plan es elevada, hará que tributes por los tipos máximos del 45%.
La alternativa es recuperar el dinero en forma de renta, es decir, cobrando una parte cada año. Si haces bien tus números seguro que te renta más desde un punto de vista fiscal.
¿Y si el fallecido ya había empezado a cobrar el plan?
Esta es una alternativa cada vez más habitual por las prejubilaciones y el aumento de la esperanza de vida. El proceso general no es distinto de lo que acabo de explicar, aunque sí hay diferencias en función del tipo de plan de pensiones. En concreto, hay que distinguir entre los planes de rentas financieras y los planes de rentas aseguradas.
Heredar un plan de rentas financieras
Las rentas financieras son las más extendidas. Básicamente se trata de rentas que no tienen plazo ni rentabilidad garantizada. Para que lo entiendas mejor, es cuando tomas lo ahorrado y empiezas a gastarlo hasta que se termina el capital, independiente de tu edad.
Este caso es el más sencillo, ya que los beneficiarios recuperarán la parte que no se hubiese consumido. A modo de ejemplo, el padre de Juan tenía un plan de pensiones con 250.000 euros. A su fallecimiento había gastado 150.000 euros, por lo que todavía restaban 100.000 euros de capital. Esa es la cantidad que Juan heredará.
Heredar un plan de rentas garantizadas.
Este tipo de planes está cada vez más en desuso y suele estar ligado a seguros de ahorro. De forma resumida, aseguran el cobro de una cantidad de forma temporal o vitalicia, sin importar el dinero que haya en el plan o las oscilaciones del mercado.
En caso de que el asegurado no hubiese pactado una reversión de sus derechos sobre otra persona, no habrá nada que cobrar y dará igual que haya o no dinero remanente en el plan.
Si se contrató una reversión en una renta asegurada vitalicia para otra persona, ésta seguirá cobrando el capital tal y como venía haciendo el fallecido.
Otra alternativa cada vez más utilizada y que no es compatible con la reversión de rentas pasa por asegurar que los beneficiarios podrán cobrar un porcentaje del capital de fallecimiento que se formalizó en su momento. Es decir, los herederos pasarían a percibir una parte del dinero por el que se contrató la renta garantizada.
Abrazos,
PD1: Recomendaciones interesantes para animarte a que ahorres para tu jubilación:
1) ¿Cuándo hay que empezar a ahorrar para la jubilación?
Lo ideal es empezar a ahorrar lo antes posible. Un plan para la jubilación funciona a largo plazo y cuanto más tiempo aportemos, más capacidad de generar ahorro finalista se tendrá.
2) ¿Qué opciones de inversión recomienda a largo plazo para un joven?
Se podría recomendar a un joven invertir en un plan de pensiones con un 70% de renta variable. Una buena opción son los productos adaptados al ciclo de vida, cuya característica principal es que el ahorro sigue un itinerario de inversión diseñado para optimizar el perfil de riesgo en función de la edad. Un buen ejemplo sobre este tipo de producto son los Planes Destino.
3) ¿Qué otras opciones tengo, además del plan de pensiones, si soy joven?
Además de los planes de pensiones, existen otros productos que también están orientados al ahorro para la jubilación y que gozan de ventajas fiscales y, a su vez, no tienen limitaciones para liquidarlos cuando lo necesites. Entre ellos estarían los PIAS o los SIALP.
4) ¿Dónde puedo invertir si no tengo aversión al riesgo?
Invierte en renta variable, el activo que ofrece mejores perspectivas en el largo plazo; eso sí, con mayor volatilidad, pudiendo tener mayor fluctuación tanto al alza como a la baja.
5) ¿Qué diferencia hay entre un plan de pensiones y un fondo de pensiones?
Un fondo de pensiones es un patrimonio invertido en diferentes instrumentos, de acuerdo a la política de inversión del fondo. Un plan de pensiones es un contrato en el que se definen los derechos y obligaciones de sus partícipes y beneficiarios en un fondo de pensiones.
6) ¿Se pueden desgravar los planes de pensiones?
Sí. Las aportaciones pueden ser objeto de reducción en la base imponible general, con el límite de 8.000 € anuales para el conjunto de aportaciones a todos los sistemas de previsión social o el 30% de los rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas. Estos límites varían si nos encontramos en el País Vasco o Navarra.
7) ¿Hay que poner el dinero debajo de un colchón?
Como bien recordó Ernesto Moreno a los lectores de El Confidencial, Enric Fernández, Director Corporativo de Planificación Estratégica y Estudios de CaixaBank, responde a esta pregunta en un vídeo de reciente publicación.
8) ¿Hasta qué edad se puede contratar un plan de pensiones?
Se puede contratar hasta justo antes de la jubilación, aunque se recomienda iniciar el ahorro lo antes posible. El momento en que obtenemos nuestro primer ingreso es un buen momento para empezar a ahorrar. Hay que tener en cuenta los tres ingredientes de una buena jubilación.
9) ¿Dónde puedo invertir mi dinero para sacar el máximo rendimiento?
Depende de varios factores. Por un lado, de tus objetivos, que pueden ser el ahorro para la jubilación. Por otro lado, de tu perfil de riesgo. Se recomienda diversificar.
10) ¿Qué son los productos de ciclo de vida?
Los planes de ciclo de vida son planes de pensiones que adecuan las inversiones, según avanza el tiempo, al perfil de riesgo del inversor. Es decir, tienen una hoja de ruta dinámica que va adaptando el riesgo de las inversiones a medida que se acerca el momento de la jubilación, con mayor renta variable al inicio y menor peso de la misma al final.
11) ¿Cuáles son las principales características a tener en cuenta a la hora de contratar un plan de pensiones?
Lo más relevante al contratar un plan de pensiones es valorar su comportamiento en el largo plazo, analizando su consistencia y capacidad de preservar el capital. También es importante, cuando se trata de confiar nuestros ahorros, hacerlo con entidades de demostrada solvencia.
12) ¿La situación de baja rentabilidad de los bancos afecta a los planes de ahorro a largo plazo?
La rentabilidad del negocio bancario no tiene incidencia en la labor que desempeñamos las gestoras. Los planes de ahorro a largo plazo tendrán rentabilidad o no en función de la composición de la cartera seleccionada en cada caso.
PD2: Entre otros, el problema de las pensiones es que la gente se jubila antes de lo que manda la ley… Malditas jubilaciones anticipadas de los bancos y demás…
La edad media real a la que se jubilan los trabajadores es 64,1 años
El aumento de las jubilaciones anticipadas es el principal motivo por el que no se logra retrasar la edad real de retiro
En 2016 el 44% de las altas de jubilación fueron antes de los 65 años.
Una de las recetas que se están escuchando en la Comisión parlamentaria del Pacto de Toledo que estudia la reforma de la Seguridad Social es el retraso de la edad de jubilación. El miércoles fue el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, quien planteó la necesidad de aprobar "retrasos adicionales" de la edad de jubilación. En 2017 la edad legal está fijada en 65 años y 5 meses, a no ser que el trabajador tenga cotizados más de 36 años y tres meses, en cuyo caso podrá jubilarse a los 65 años. La reforma de pensiones aprobada por el Gobierno Zapatero incluía un retraso progresivo de la edad de jubilación hasta los 67 años. Esta progresividad va ampliando año a año la edad legal hasta llegar a los citados 67 años desde 2027.
Este retraso de la edad de retiro ya se aprobó en previsión de los futuros problemas financieros de la Seguridad Social, que requieren que los trabajadores coticen durante más tiempo y cobren pensión durante menos años.
Sin embargo, la realidad es que los trabajadores españoles se jubilan de media antes de lo que estipula la ley. De hecho, según los datos oficiales del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, la edad media real de jubilación en España en 2016 fue de 64,1 años. Las mujeres, con carreras más cortas de cotización que los hombres, aguantan más en sus trabajos y se jubilan de media a los 64,6 años, mientras que los hombres lo hacen a los 63,9 años de media. Este efecto es el mismo según el tipo de trabajador. Así, los autónomos tiran al alza de la edad media real de retiro, ya que los hombres se jubilan a los 65,3 años, frente a los 63,6 de los trabajadores del Régimen General; las mujeres autónomas se retiran de media a los 66 años, frente a los 64,3 de las asalariadas.
En cualquier caso, la edad media real de jubilación está estancada en los 64,1 años por segundo año consecutivo. Durante siete años seguidos la edad real de jubilación en España creció, pasando de los 63,4 años en 2006 a los 64,3 años en 2013. En ese año, el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó una nueva reforma de pensiones en la que endureció el acceso a las jubilaciones parcial y anticipada. Ese año entró también en vigor el retraso progresivo de la edad de jubilación a los 67 años aprobada en 2011. Pero lejos de empezar a jubilarse más tarde, desde 2014 la edad media real de retiro se ha estancado, en contra de lo perseguido por los legisladores con la aprobación de reformas citadas. ¿Por qué no logran retrasar la edad de jubilación? El principal motivo es el aumento constante de las jubilaciones anticipadas y parciales, antes de 65 años. En 2013, este tipo de retiros suponía el 38% de las nuevas altas de jubilación;en 2014, pasaron a ser el 41%;en 2015, el 43,8% y en 2016 ya el 44,3% de los nuevos jubilados.
La causa por la que no está surtiendo efecto la reforma que en 2013 endureció los accesos a la jubilación anticipada y parcial es porque la propia ley establece excepciones que permiten a numerosos trabajadores jubilarse de forma anticipada con las condiciones de la ley de 2011, más beneficiosa para el trabajador pero más costosa para el sistema que la de 2013. Ahora, el 45% de las nuevas jubilaciones anticipadas aún son con la legislación anterior a 2011. Otro de los motivos que impiden aumentar la edad real de jubilación es el escaso éxito de la prolongación de la vida laboral.
La jubilación anticipada lleva asociado un lógico recorte de la cuantía, que es de un 8% por cada año de anticipación sobre la edad legal con carácter general. Si se acreditan más de 30 años de cotización, la reducción será de un 7,5% por cada año de anticipo, del 7% si se acreditan de 35 a 37 años cotizados, un 6,5% de reducción por año si se acreditan 38 o 39 de cotización y solo un recorte del 6% por cada año si se han cotizado 40 años o más.
Los tipos de jubilación: parcial, anticipada, demorada o activa
En España el 51% de los trabajadores se jubilan al cumplir la edad de jubilación;el 44% se retira de forma temprana antes de cumplir esa edad;y solo el 5% sigue trabajando después de cumplir la edad de jubilación. Estas son las principales modalidades de retiro:
Jubilación ordinaria. Se produce cuando el trabajador cumple la edad legal de retiro ese año. Con anterioridad a 2013 eran los 65 años, pero desde entonces sube cada año de forma progresiva, este año son los 65 años y 5 meses. El trabajador debe haber cotizado al menos 15 años a la Seguridad Social y dos de estos años deben estar en los diez anteriores a la jubilación.
Jubilación anticipada. Se produce antes de cumplir la edad legal de jubilación. Hay dos tipos:la forzosa –derivada del despido involuntario del empleado–;y la voluntaria, a la que se accede por propia voluntad del trabajador. Tienen requisitos diferentes. Para acogerse a la forzosa, el trabajador debe haber cumplido una edad inferior en cuatro años a la edad legal de jubilación en cada momento. Además tiene que estar inscritos como demandantes de empleo al menos seis meses antes de la solicitud de jubilación y acreditar al menos 33 años cotizados.
En el caso de la voluntaria el trabajador debe tener como mínimo dos años menos que la edad legal de jubilación en cada caso. Tendrá que acreditar un mínimo de 35 años cotizados a la Seguridad Social.
Jubilación parcial: En esta modalidad el trabajador reduce su jornada y empieza a cobrar la parte proporcional de la pensión. La edad de acceso depende de si la empresa contrata a un trabajador que le releve durante la reducción de la jornada o no. Si no hay relevista se exige la edad legal de jubilación. Pero si lo hubiera, actualmente está vigente un aumento progresivo de la edad y los años cotizados exigidos para su acceso. En 2017 la edad mínima son 61 años y 10 meses con un mínimo de 33 años cotizados. A partir de 2027 la edad mínima serán 63 años o 65 si no se han cotizado más de 33 años. La reducción de la jornada está entre el 25% y el 50%, a no ser que el trabajador relevista tenga un contrato fijo, en ese caso puede reducirse un 75%. A diferencia de la jubilación anticipada, que sí está penalizada con un recorte de la cuantía de la pensión, en la jubilación parcial se cobra el 100% de la pensión cuando uno se jubila del todo.
Jubilación demorada: El trabajador tiene que haber cotizado como mínimo 15 años en el momento de cumplir la edad legal de jubilación en cada momento. Se reconoce al trabajador un incremento de la pensión del 2% por cada año más completo de cotización si se tenían cotizados hasta 25 años; un 2,75% más, si se hubieran cotizado de 26 a 37 años y un 4% adicional, con más de 37 años cotizados.
Jubilación activa: Los trabajadores que acceden a esta jubilación pueden seguir trabajando después de jubilarse y compatibilizar su sueldo con el cobro del 50% de la pensión. Deben haber cumplido la edad legal de jubilación en cada momento y haber cotizado para cobrar el 100% de la pensión.
PD3: El Papa Francisco ha respondido a 3 preguntas sobre: el miedo al "para siempre"; el estilo de la vida matrimonial; y el tipo de celebración del matrimonio. Estas son algunas de sus palabras:
PRIMER CONSEJO: REZAR A DIARIO PARA DURAR SIEMPRE
Es importante preguntarnos si es posible amarse "para siempre". Hoy en día muchas personas tienen miedo de tomar decisiones definitivas, para toda la vida, porque parece imposible... y esta mentalidad lleva a muchos que se preparan para el matrimonio a decir: Estamos juntos hasta que nos dure el amor.... Pero, ¿qué entendemos por "amor"? ¿Sólo un sentimiento, una condición psicofísica?
Ciertamente, si es así, no se puede construir encima nada sólido. Pero si el amor es una relación, entonces es una realidad que crece y también podemos decir, a modo de ejemplo, que se construye como una casa. Y la casa se edifica en compañía, ¡no solos! No querréis construirla sobre la arena de los sentimientos que van y vienen, sino sobre la roca del amor verdadero, el amor que viene de Dios...
La familia nace de este proyecto de amor que quiere crecer como se construye una casa: que sea lugar de afecto, de ayuda, de esperanza... Así como el amor de Dios es estable y para siempre, queremos que el amor en que se asienta la familia también lo sea.
No debemos dejarnos vencer por la "cultura de lo provisional". Así que el miedo del "para siempre" se cura día tras día, confiando en el Señor Jesús en una vida que se convierte en un viaje espiritual diario, hecho de pasos, de crecimiento común...
Porque el "para siempre" no es sólo cuestión de duración. Un matrimonio no se realiza sólo si dura, es importante su calidad. Estar juntos y saberse amar para siempre es el desafío de los esposos cristianos.
En el Padrenuestro decimos "Danos hoy nuestro pan de cada día". Los esposos pueden rezar así: "Señor, danos hoy nuestro amor de todos los días.... enséñanos a querernos".
El matrimonio es un trabajo de orfebrería que se hace todos los días a lo largo de la vida. El marido hace madurar a la esposa como mujer, y la esposa hace madurar al marido como hombre. Los dos crecen en humanidad, y esta es la principal herencia que pasan a los hijos.
SEGUNDO CONSEJO: APRENDER A CONVIVIR
"La convivencia es un arte, un camino paciente, hermoso y fascinante... que tiene unas reglas que se pueden resumir en tres palabras: ¿Puedo?, gracias, perdona.
¿Puedo? Es la petición amable de entrar en la vida de algún otro con respeto y atención. El verdadero amor no se impone con dureza y agresividad. San Francisco decía: La cortesía es la hermana de la caridad, que apaga el odio y mantiene el amor.
Y hoy, en nuestras familias, en nuestro mundo, a menudo violento y arrogante, hace falta mucha cortesía.
Gracias. La gratitud es un sentimiento importante. ¿Sabemos dar las gracias? Es importante tener presente que la otra persona es un don de Dios, del que siempre debemos dar gracias. Una vez una anciana de Buenos Aires me dijo: la gratitud es una flor que crece en terreno noble.
En vuestra relación ahora y en vuestra futura vida matrimonial, es importante mantener viva la conciencia de que la otra persona es un don de Dios... y a los dones de Dios se dice "gracias". No es una palabra amable para usar con los extraños, para ser educados. Hay que saber decirse gracias para caminar juntos.
Perdona. En la vida cometemos muchos errores, nos equivocamos tantas veces. Todos. De ahí la necesidad de utilizar esta palabra tan sencilla: "perdona". En general, cada uno de nosotros está dispuesto a acusar al otro para justificarse. Es un instinto que está en el origen de tantos desastres.
Aprendamos a reconocer nuestros errores y a pedir disculpas. También así crece una familia cristiana. Perdóname que haya levantado la voz. Perdóname que haya pasado sin saludarte. Perdóname por llegar tarde, porque esta semana he estado tan silencioso, por no haberte escuchado, porque estaba enfadado y te lo he hecho pagar a ti… Todos sabemos que no existe la familia perfecta, ni el marido o la mujer perfectos. Existimos nosotros, los pecadores.
Jesús, que nos conoce bien, nos enseña un secreto: que un día no termine nunca sin pedir perdón, sin que la paz vuelva a casa. Si aprendemos a pedir perdón y perdonar a los demás, el matrimonio durará, saldrá adelante.
TERCER CONSEJO: BODA SOBRIA
La celebración del matrimonio debe ser una fiesta, pero una fiesta cristiana y no mundana. Lo que sucedió en Caná hace dos mil años, sucede en realidad en cada fiesta nupcial. Lo que hará pleno y profundamente verdadero vuestro matrimonio será la presencia del Señor que se revela y nos otorga su gracia.
Al mismo tiempo, es bueno que vuestro matrimonio sea sobrio y destaque lo que es realmente importante. Algunos están muy preocupados por los signos externos: el banquete, los trajes...
Estas cosas son importantes en una fiesta, pero sólo si indican el verdadero motivo de vuestra alegría: la bendición de Dios sobre vuestro amor. Haced que como el vino de Caná, los signos externos de vuestra ceremonia revelen la presencia del Señor y recuerden a vosotros y a todos los presentes el origen y la razón de vuestra alegría. El señor multiplicará vuestro amor y os lo dará fresco cada día: ¡tiene una reserva infinita!