Sigue con su mal de ojo, su mayor
problema. Hace años decidió invertir una gran suma en comprar un banco turco,
el Garanti. Compró caro y muchos no entendimos esa diversificación, tantas
veces comentadas en estas líneas. Lejos de amilanarse, siguió comprando para
hacerse con el control total. Desde entonces, ha sido su calvario. Turquía es
lo que es, que lo sabemos muy bien. Y el futuro en Turquía no es que sea muy
cierto.
Para muestra: Erdogan echa al
gobernador de su Banco Central, y se lía parda:
El bono a 10 años:
Y la lira turca no levanta cabeza. Lo que le estará costando esa depreciación masiva de su divisa…
Ayer su bolsa se desplomó:
Y la caída en los últimos años del MSCI Turquía es enorme:
El banco Garanti (ayer -19%), culpable de los males del BBVA, lleva una marcha triunfal:
Y el BBVA se la metió casi un 8% ayer, acumulado un desastre:
Lo gracioso es que el tipo del BBVA, que decidió invertir en el banco turco, es desde 2019 el presidente del BBVA, y no estando del todo contento, nombró a un turco como CEO del banco Garanti hace poco, denotando un nuevo despropósito…
Abrazos,
PD1: ¿Te has confesado ya? Se
acaba la Cuaresma y te lo estás perdiendo. No sabes lo contento que sales tras
pedir perdón por los errores cometidos. Somos débiles, y el sacramento de la
Penitencia, nos da la gracia para no volver a caer tan frecuentemente. Y no, no
sirve auto-perdonarnos nosotros mismos. Es pura soberbia.
Si ha pasado mucho tiempo que no
hablas con un cura, hazlo y le pides que te ayude a confesarte. Sales con una
paz espectacular, sales con esa sensación de haber recibido el perdón de Dios,
no del cura, que es para echarse a llorar…, o a reír de la alegría que te deja.