04 febrero 2019

Sociedad 5.0

Estas son las tendencias futuras. El catedrático de Economía Antonio Pulido nos cuenta esto:

De economía 4.0 a sociedad 5.0

De economía 4.0 a sociedad 5.0

Pasar de considerar como meta prioritaria una super-tecnificada Industría 4.0 a una super-inteligente, pero también humanista y solidaria, Sociedad 5.0 ha sido un salto decisivo que se va asimilando paso a paso. Lo que empieza como llamada a una radical tecnificación industrial, va transformándose progresivamente en una exigencia para todo el proceso económico (Economía 4.0), para todo el proceso integrador de la economía mundial (Globalización 4.0) y culmina en una nueva visión de la sociedad en su conjunto.
Hace ya dos años dediqué un post a la nueva moda de la llamada "Industria 4.0" (https://www.antoniopulido.es/realmente-la-industria4-0/). Como indicaba entonces, la confusión hace daño al referirnos a un concepto, de gran actualidad y potencia de transformación, que se ha transformado en un hashtag de difusión mundial de primer orden: #Industry4.0. "Industry" se utiliza en muchas ocasiones más allá de las estrictas fronteras del sector secundario para referirse a todo tipo de actividad y, en particular incluyendo servicios.
El nombre de Industria 4.0 tiene su origen en una propuesta de política industrial realizada en 2011 por el presidente de la Academia de Ciencias  e Ingeniería de Alemania, pero su difusión está muy unida al World Economic Forum y al libro de su fundador, Klaus Schwab: The Fourth Industrial Revolution, 2016.
La Primera Revolución Industrial (1RI) del siglo XVIII con sus innovaciones mecánicas y de vapor, se considera que tuvo un nuevo impulso en los inicios del siglo XX  (2RI) de la mano de la electricidad y las técnicas de producción masiva. La 3RI llega después de la Segunda Guerra Mundial con la transformación informática que supone el uso de ordenadores. La novedad del momento está en proponer que ya está en marcha una Cuarta Revolución Industrial (4RI o Industria4.0) a través de una creciente e interconectada digitalización.
Para algunos era sólo una nueva denominación con impacto, que podía caer en la exageración aprovechando algunas peculiaridades de la rápida innovación tecnológica y social. Para otros, entre los cuales me incluía, era ya un toque de atención imprescindible sobre el futuro inmediato para gobiernos, empresas y para la sociedad en su conjunto.
En el Foro Económico Mundial de Davos de enero de 2018, ya se utiliza la denominación Globalización 4.0 para rediseñar un proceso que ha producido también efectos de "amplia inseguridad y frustración" que parece exigir acciones correctoras para hacerlo más inclusivo (reciente Cumbre  G-20 de Buenos Aires). Como indicaba hace unos días Andrés Ortega, investigador del Real Instituto Elcano, (https://blog.realinstitutoelcano.org/globalizacion-4-0-centrada-en-personas/): " hay al menos una toma de conciencia más general, ante el presente y de cara a construir una sociedad futura que gire en torno a las personas, humano-céntrica, y no en torno a las cosas, por muy tecnológicamente avanzadas que sean".
Ya en 2016 la Federación empresarial de Japón (Keidanren) elaboró un primer documento (http://www.keidanren.or.jp/en/policy/2016/029_outline.pdf) titulado Hacia la realización de una nueva economía y sociedad. Reforma de economía y sociedad para profundizar en la "Sociedad 5.0″.  Suponía marcar como objetivo alcanzar el nivel 5 de Sociedad super-inteligente, tras la evolución  desde las sociedades de la caza, agraria, industrial y de la  sociedad de la información de finales del siglo XX.
Para alcanzar este nuevo nivel, la iniciativa japonesa detecta cinco murallas de contención a derribar (https://www.i-scoop.eu/industry-4-0-society-5-0/):
1.-Administración Pública, que se implique en una auténtica estrategia nacional
2.-Sistema legal, que incentive la implementación de técnicas avanzadas
3.-Marco tecnológico, desde una política agresiva de I+D hasta los "fundamentos del conocimiento" y la protección de los principales avances tecnológicos y sus impactos
4.-Recursos humanos, con una adecuada reforma educativa y de gestión de recursos humanos en habilidades digitales avanzadas
5.-Aceptación e implicación social (la gran muralla), considerando aspectos incluso éticos sobre la relación hombre-máquina o filosóficos sobre aspectos tales como la felicidad individual
Aunque puede haber componentes de marketing de ideas y "postureo" en algunas de las iniciativas para vincular cambio tecnológico, económico y social, personalmente creo que es imprescindible mantener un enfoque amplio y socialmente comprometido de la innovación. Destacar sólo los aspectos económicos positivos del cambio tecnológico sería una visión miope y contraproducente. Los cambios tecnológicos tienen también un coste social que, además, pueden distribuirse muy desigualmente entre países, empresas o personas. Anticipar, atender y paliar esos efectos es una garantía imprescindible para conseguir esa necesaria aceptación e implicación social.
Abrazos,
PD1: Ayer en Misa tocó la carta de Pablo a los Corintios. Tan conocida de las bodas, pero tan bonita. Es la mejor definición del amor que nos tenemos que dar entre nosotros:
Ambicionad los carismas mayores. Y aún os voy a mostrar un camino más excelente.
Si hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, pero no tengo amor, no sería más que un metal que resuena o un címbalo que aturde.
Si tuviera el don de profecía y conociera todos los secretos y todo el saber; si tuviera fe como para mover montañas, pero no tengo amor, no sería nada.
Si repartiera todos mis bienes entre los necesitados; si entregara mi cuerpo a las llamas, pero no tengo amor, de nada me serviría.
El amor es paciente, es benigno; el amor no tiene envidia, no presume, no se engríe; no es indecoroso ni egoísta; no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad.
Todo lo excusa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
El amor no pasa nunca.
Las profecías, por el contrario, se acabarán; las lenguas cesarán; el conocimiento se acabará.
Porque conocemos imperfectamente e imperfectamente profetizamos; más, cuando venga lo perfecto, lo imperfecto se acabará.
Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre acabé con las cosas de niño.
Ahora vemos como en un espejo, confusamente; entonces veremos cara a cara. Mi conocer es ahora limitado; entonces conoceré como he sido conocido por Dios.
En una palabra: quedan estas tres: la fe, la esperanza y el amor. La más grande es el amor.
En este mundo donde la gente mayor se comporta como adolescentes, es el ideal a seguir. Y si cambias el mensaje y no consideras lo referente a amar a otros sino amar a Dios, sirve también este mensaje tan claro.