Sí es, muy volátil… y
recientemente, muy fuerte.
Nadie discute que el dólar (USD) es la divisa de referencia mundial y
la divisa en la que se materializa la gran mayoría del
comercio internacional. Esto no siempre ha sido así. Hasta 1955, la principal divisa empleada en el comercio
mundial fue la libra esterlina. Conviene conocer la historia
para escudriñar en las causas que llevaron a la
situación actual.
En 1944 tuvo lugar el acuerdo de Bretton Woods, por el cual 44 monedas quedaban vinculadas al USD y, a su vez, el USD era convertible a oro a un cambio de $35 la onza. El USD se convirtió en la única divisa respaldada por el oro. Desde entonces, los distintos estados aumentaron sus reservas en USD, al entender que era equivalente a poseer reservas en oro. Esta confianza en la convertibilidad del USD en oro a un cambio fijo se conservaría mientras EEUU mantuviese a raya sus déficits públicos y su emisión de moneda.
A partir de los años 60 EEUU empieza a imprimir más y más dólares. Algunos
estados, empezando por Francia, exigen la conversión
de sus reservas en USD a oro, en virtud de los acuerdos firmados en
Bretton Woods. EEUU pasó de tener 22.000 toneladas de oro en 1945 a apenas
8.000 toneladas en 1971. El 15 de agosto de 1971, EEUU suspende "temporalmente"
la convertibilidad del USD a oro. Dicha temporalidad dura hasta hoy.
Todos los países que tenían
reservas en USD convertible a oro a un tipo prefijado, pasaron a tener una
divisa sin respaldo físico alguno. A pesar de ello, el USD siguió siendo la
divisa de referencia. Esto se debe, en gran medida, al acuerdo alcanzado en 1973 entre EEUU y Arabia Saudita.
En octubre de 1973 la OPEP, liderada por Arabia Saudita, impuso
un embargo de petróleo a EEUU y a otros países occidentales. El precio del petróleo se cuatriplicó, pasando de $3 a
$12 en apenas tres meses. EEUU logró llegar a un acuerdo con Arabia Saudita,
cuya integridad no se conoció entonces, que dio lugar al nacimiento de los
"petrodólares".
Arabia Saudita se comprometía a
vender su petróleo exclusivamente en USD y a destinar cantidades considerables
de dichos USD a la adquisición de bonos del tesoro estadounidense. En
contrapartida, EEUU se encargaría de la protección militar
del reino saudita. La venta sólo en dólares se extendió al resto de
países de la OPEP y luego a otras materias primas.
Cincuenta años después de dicho
acuerdo, el USD sigue siendo la principal moneda de comercio mundial. Las
ventajas para EEUU de este privilegio exorbitante son
numerosas:
- Al ser necesario disponer de USD para la importación de
la gran mayoría de bienes en el mundo, todos los países se ven en la
obligación de tener reservas en USD para hacer frente a sus
compromisos de comercio exterior. Esto es así, incluso si la operación de
comercio internacional no involucra a EEUU como importador o exportador.
- Las reservas en USD de
los distintos países no están en liquidez, sino invertidas,
principalmente, en bonos del tesoro estadounidense.
Esto facilita enormemente la financiación de los déficits y la deuda pública
estadounidense.
- Adicionalmente, EEUU es capaz de controlar todos y cada uno
de los pagos en USD realizados a través del sistema
SWIFT, como se ha demostrado cuando se han impuesto sanciones a distintos
países como Irán, Venezuela o Rusia.
- Como se ha visto en el caso de
las sanciones a Rusia, EEUU tiene la capacidad de congelar las
reservas en USD y en bonos del tesoro estadounidense de un país considerado
hostil en un determinado momento.
A día de hoy, no existe ninguna divisa alternativa que pueda disputar al USD la
hegemonía como moneda de reserva y de pago en los intercambios
comerciales internacionales. Aun así, existen síntomas claros que indican que
hay movimientos estructurales lentos pero imparables que pueden
debilitar sensiblemente la hegemonía del dólar en el tiempo. Entre ellos:
- La intención manifestada de Arabia Saudita de vender su petróleo en
moneda distinta al USD. De hecho, ha firmado ya un acuerdo de largo plazo con China para realizar el comercio entre
los dos países en yuanes.
- El acuerdo de los países BRICS+ (Brasil, Rusia,
India, China, Sudáfrica + Arabia Saudita, EAU, Irán, Etiopía, Egipto y
Argentina) para realizar el comercio entre ellos en sus
propias divisas. No será inmediato, pero el camino está marcado.
El USD seguirá siendo la divisa de
referencia durante un largo periodo de tiempo, pero desde hace 50 años el USD no es oro. Sólo hay que observar el tipo de cambio ORO/USD. De los $35 por onza
acordados en Bretton Woods en 1944, hemos pasado a los $1.900. Una depreciación del 98,2% en 80 años.
Abrazos,
PD: Hoy el mensaje es muy claro. No hay que ser fraile ni cura para santificarse. Antes sí que era bastante necesario… Hoy lo podemos conseguir en nuestras labores diarias, con nuestro trabajo y las miles de cosas que hacemos cada día, tratando de elevarlas y dar Gloria a Dios. Imitar el Señor. Querer parecernos a Él cada día…