12 abril 2019

seguimos iguales


Las bolsas suben, el Nasdaq vuelve a marcar nuevos máximos históricos, todos los miedos han quedado atrás. Los bancos centrales no van a permitir ningún desliz. O como se rumoreaba esta semana, estaría el BCE dispuesto a comprar acciones si estas bajaran algo…

Que acabe la aberración

Vivimos en un mundo en el que las mayores aberraciones son normalizadas simplemente porque la sociedad se ha acostumbrado a convivir con ellas. En el aspecto económico ocurre lo mismo con la aceptación de los tipos de interés negativos como algo normal, no discutido e incluso positivo (al menos para los banqueros centrales europeos).
Sorprende la persistencia del BCE en mantener los tipos de interés negativos, cuando los hechos demuestran que no consiguen dinamizar la economía. Los bancos europeos tienen depositado 600.000 millones de euros en el BCE pagando un 0,4% anual. Mantener liquidez por encima de los niveles requeridos por la regulación les supone un coste. La imposición de tipos de interés negativos sobre el exceso de liquidez de los bancos tiene como objetivo principal forzar a las entidades a aumentar el crédito a la economía. El mantenimiento permanente de cantidades tan elevadas a un coste del 0,4% es una prueba evidente de que no por situar los tipos en negativo la banca va a prestar más.
Sorprende igualmente que el presidente del BCE dude de si realmente los tipos negativos generan efectos negativos (if any). Retorcer la racionalidad económica hasta hacer que el deudor cobre intereses por endeudarse, evidentemente lleva aparejados efectos nocivos.
De acuerdo con la RAE, el tipo de interés es la retribución por el uso de una unidad de capital durante un período de tiempo. Difícil entender que una retribución puede ser negativa.
Los principales beneficiados de los tipos negativos son los estados de la Eurozona, que logran financiar una parte significativa de su nueva deuda a tipos negativos. Es decir, los inversores deben pagar intereses por tener el privilegio de financiar al estado en cuestión.
Situar el tipo de interés del activo sin riesgo en negativo provoca que los tipos de interés de mercado de todos los activos también desciendan, desvirtuando las primas de riesgo que deberían existir. A modo de ejemplo, durante este primer trimestre del año empresas como LVHM y SANOFI han emitido bonos con rentabilidad negativa. El comprador de dichos bonos tiene garantizada la pérdida si los mantiene a vencimiento. En España, los pagarés de empresas con rating se emiten con tipos negativos. Dichas empresas cobran intereses por endeudarse.
Cuanto más tiempo transcurra con los tipos negativos, más olvidado quedará el concepto de "prima de riesgo" que debe exigirse a toda inversión en función del riesgo asumido.
La mejor medida que podría adoptar el BCE sería situar los tipos de depósito a cero. Inevitablemente supondría un cierto repunte de los tipos de interés de mercado: el Tesoro dejaría de cobrar intereses por emitir letras; las empresas con rating que emiten pagarés dejarían de percibir intereses por endeudarse; el Euríbor dejaría de estar en negativo y los tipos de las hipotecas a tipos variable aumentarían. Aun así, cuanto más tiempo transcurra con tipos negativos peores serán los efectos de la futura "normalización".
Mantener los tipos de interés en negativo transmite el mensaje de una situación de emergencia económica que, hoy en día, parece superada. ¿o realmente cree el BCE que seguimos en estado de emergencia? Adicionalmente, una vez que se perfora el nivel de CERO por ciento en los tipos de interés, ¿dónde se sitúa el tipo mínimo? Primero se estableció en -0,1%, luego -0,2%, posteriormente -0,3%, desde marzo de 2016 en -0,4%. ¿Qué impide llegar a -1%, -3% o -5%? Por algún poderoso motivo la Reserva Federal estadounidense nunca ha traspasado el umbral del cero en los tipos de interés. Las autoridades estadounidenses han tenido muy claro en sus decisiones que el suelo de los tipos de interés se sitúa en el 0%, y no más abajo.
Lamentablemente en Europa los ahorradores conservadores seguirán sufriendo la represión financiera de los tipos negativos: una subvención a los Estados y deudores, a costa de un impuesto invisible sobre el ahorro.
Abrazos,
PD1: Que pases una muy feliz y santa semana. Que contemples este gran misterio de dolor y redención… Ya sabes que como antiguamente se daban las misas en latín, de espaldas y sin altavoces, el pueblo no se enteraba de nada y las procesiones de Semana Santa servían como catequesis… Esas imágenes que reflejaban los momentos de estos días que vienen, servían para que las personas visualizaran todo y se enteraran de algo. Quizás ahora haya que estar más dentro, que hay menos folclore que fuera. Que descanses con tu familia. Yo estaré por Viso del Marqués con los míos en una casita que hemos alquilado. Si estás por la zona llámame.