Hoy te quiero resumir nuestro tortuoso camino que hemos recorrido en esta larga crisis que atravesamos:
Las expectativas de crecimiento no son muy halagüeñas. Según BNP:
En toda la Unión Europea no se espera un crecimiento mayor del 2% (incluso muy por debajo dentro de varios años) hasta al menos el año 2022… Esto quiere decir que ya las estimaciones se muestran muy cautas y se espera que convivamos con una larga agonía de bajo crecimiento económico en una zona que tiene sobrecapacidad de demasiadas cosas… Ojo, no mires las perspectivas de tipos de interés que te va a entrar el canguelo…
Estamos viviendo unos años donde se recordarán en la historia por el enorme crecimiento de la masa monetaria, por la excesiva capacidad que tuvieron los bancos centrales de imprimir a lo loco…
Con el caso paradigmático estadounidense:
Que ha generado una deuda insoportable:
¿Cómo conseguirán bajar las deudas como hicieron antes?
Y no son sólo deudas públicas, son privadas y empresariales y bancarias… Nos comen por todos los lados.
En la Unión Europea, se han cortado algo:
Los bancos sí se apalancaron demasiado:
Pero piden con vehemencia que lleguen los impulsos financieros:
El FMI pide al BCE que compre deuda "a gran escala" para estimular el crecimiento
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha alertado este jueves de que la inflación en la eurozona es "preocupantemente baja, incluyendo en los países del centro" y que el paro es "inaceptablemente alto" y ha reclamado al Banco Central Europeo (BCE) que se plantee comprar deuda pública "a gran escala" para estimular el crecimiento.
"Se necesita mucho más crecimiento para reducir el desempleo y la deuda", avisa el FMI en su informe de recomendaciones a la eurozona. Su directora gerente, Christine Lagarde, ha sido la encargada de presentarlo a los ministros de Economía de la eurozona en Luxemburgo.
"Si la inflación se mantiene obstinadamente baja, el BCE debería considerar un programa a gran escala de compra de activos, principalmente de bonos soberanos en función de la clave de capital del Banco", reclama el Fondo. "Esto impulsaría la confianza, mejoraría los balances de empresas y hogares y estimularía el crédito", lo que podría tener "un impacto significativo en la demanda y la inflación".
A juicio del FMI, las recientes decisiones del BCE de reducir los tipos de interés y de inyectar 400.000 millones de liquidez a la banca constituyen un paso positivo, pero que podría ser insuficiente.
El Fondo reclama además que no se imponga más austeridad a los países de la eurozona. "Las sorpresas negativas en materia de crecimiento no deberían desencadenar esfuerzos adicionales de consolidación", apunta el informe. Y apuesta por un plan a nivel de la UE de inversión en infraestructuras de transporte, comunicaciones y energía porque "sentaría las bases de un crecimiento sostenible, manteniendo a los países dentro de los límites del marco presupuestario".
La institución dirigida por Lagarde recomienda además a los países acreedores de la eurozona, como Alemania, que aumenten la inversión en infraestructuras. Por su parte, los países deudores deben proseguir los esfuerzos para mejorar su competitividad.
El Eurogrupo debería aprobar una estrategia global para abordar el paro juvenil, que tiene que incluir medidas como la reducción de las cotizaciones o el ajuste del salario mínimo en línea con los costes laborales medios con el fin de evitar que los jóvenes queden fuera del mercado laboral.
El FMI ve necesario que los bancos europeos sigan ampliando capital y considera insuficiente el nuevo fondo de 55.000 millones de euros acordado por la UE para liquidar bancos con problemas. "Los recursos centralizados para la resolución podrían ser insuficientes para afrontar el estrés en grandes bancos", alerta el informe.
A medio plazo, el Fondo apuesta por simplificar y reforzar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. "Por ejemplo, la reducción de la deuda podría ser el objetivo fundamental y el equilibrio estructural el único objetivo operativo. La credibilidad de las reglas se vería reforzada con mecanismos de aplicación reforzados", señala el informe.
Algo que tiene efectos perversos en las inflaciones:
En EEUU: El crecimiento económico en parte hay que derivarlo por la subida de los precios…
Lo que valía 100 hace 16 años, ahora vale 145…
Y lo que nos cuesta las cosas es mucho más que lo que los indicadores marcan:
Cuando el verdadero problema es que el dinero no cambia de manos como antes:
Sin embargo, esos estímulos que no hemos recibido en la UE nos ha provocado unos efectos negativos:
Ay de mi querida España:
Es como la vida misma: un ciclo de estar bien, de estar mal…, que se repite constantemente:
Un abrazo,
PD1: La reacción de la Comisión Europea no es muy positiva a la reciente reforma fiscal aprobada… Ya sabía yo que no les iba a gustar. Están más preocupados por que cumplamos con el déficit y que hagamos reformas de calado, que lo que estamos haciendo de cara a la galería y las elecciones…
Bruselas carga contra la reforma fiscal: pone en peligro los objetivos de déficit
REACCIÓN DE LA COMISIÓN EUROPEA
La Comisión Europea dejaba claro el viernes pasado que discrepaba en la forma en la que España habia preparado y presentado la reforma laboral. Hoy ha asegurado que la discrepancia no se refería solo al "cómo", sino también al "qué": los técnicos del Ejecutivo comunitario creen que a la propuesta del Gobierno le faltan detalles por definir, ignora las recomendaciones de subir impuestos indirectos como el IVA y pone en peligro el cumplimiento de los objetivos de déficit [reacción completa de la Comisión Europea (en inglés)].
España se ha comprometido con la Unión Europea a situar el déficit de 2014 en el 5,8% del PIB; el del 2015, en el 4,2% y el de 2016, en el 2,8%. Las últimas previsiones macroeconómicas de la Comisión Europea ya advertían al Gobierno de que, para el año que viene, la cifra se distanciaría en más de 19.000 millones del objetivo (estaría en el 6,1% frente al 4,2% marcado). Sin embargo, Bruselas confiaba en que la reforma fiscal fuera lo suficientemente ambiciosa para cubrir buena parte de ese hueco. El primer análisis de Bruselas es que no va a serlo.
"Tenemos algunas preocupaciones porque las medidas anunciadas podrían hacer más difícil para España el cumplimiento de sus compromisos de consolidación fiscal", ha afirmado en un comunicado Simon O'Connor portavoz de Economía y Asuntos Monetarios de la Comisión Europea. "Esto es algo que deberemos analizar cuidadosamente una vez que estén disponibles los detalles completos de las medidas propuestas", ha advertido.
Esta es la forma políticamente correcta con la que los técnicos de Rehn expresan su preocupación por esos 19.000 millones de euros que separan las previsiones de déficit público del Gobierno de las europeas. El viernes pasado, fuentes comunitarias aseguraban a EXPANSIÓN que el Ejecutivo de Mariano Rajoy no había explicado todavía de forma convincente cómo "cómo se compensa la pérdida de ingresos y se mantienen los objetivos de déficit".
En el comunicado, la Comisión apunta que "el Gobierno no ha anunciado ningún trasvase de la carga fiscal desde las contribuciones a la seguridad social de las empresas hacia los impuestos indirectos -como el IVA o los impuestos medioambientales- tal y como recomienda el Consejo para poder crear empleo".
Bruselas también critica que "todavía quedan una serie de deducciones en el impuesto de la renta, y algunas de ellas se ampliarán en la reforma, lo que no parece que vaya en la dirección del objetivo de simplificar el sistema".
Y como continuación de la crítica del viernes, la Comisión Europea deja claro que el Gobierno no ha pactado ni informado convenientemente a Bruselas de la reforma: "Todavía no tenemos suficientes detalles en relación con la reforma fiscal anunciada por el Gobierno para poder hacer un análisis a fondo en estos momentos. Algunas medidas anunciadas no han sido totalmente detalladas y su impacto fiscal no se ha especificado".
Pero no todo es negativo. Desde el Ejecutivo comunitario señalan algunos aspectos "positivos" de la reforma, que sí estarían en línea con las recomendaciones europeas, como "la bajada del impuesto sobre la renta, que reducirá la carga fiscal a los trabajadores", y el "esfuerzo para ampliar la base imponible del impuesto de sociedades".
Y se confirma que lejos de bajar impuestos para todos, se bajan para los que ganan poco, y se suben los impuestos si tienes un sueldo por encima de los 33.000 euros. Es increíble.
¿Ganas más de 33.000 euros al año? Pues tú pagarás más IRPF el próximo año
Tal y como he comentado en el post anterior, todas las modificaciones que se han introducido en la reforma fiscal persiguen exclusivamente vender una "bajada de tipos" cuando en realidad al alterar los sistemas de cálculo del IRPF, se sube de facto el impuesto.
Para ejemplificar este hecho, he seleccionado el caso más genérico que existe que es la tributación individual de rendimientos del trabajo sin cargas familiares y he comparado en el cuadro superior, la cuota del IRPF que se pagaba con el impuesto en 2011 y la cuota que se va a pagar en el 2015. Las cuentas no fallan y si ganas más de 33.000 euros brutos al año, tú pagarás más IRPF que con la ley vigente sin subidas temporales. Los supuestos de partida son que todo el mundo aplica el próximo año la deducción de 2.000 euros en rendimientos del trabajo y no supongo otro tipo de tributación y he tomado como gastos deducibles el equivalente al 6,7% de Seguridad Social sobre el bruto con el tope de 42.000 euros (aproximadamente la base máxima de cotización anual).
Si es positiva en esta reforma el efecto tributario que tiene en los mileuristas (hasta 15.000 euros brutos anuales) pero a partir de este punto, los porcentajes de ahorro son muy inferiores al famoso 24% inicial que se está vendiendo de ahorro fiscal.
En el supuesto de tener hijos a cargo, el punto de equilibro se desplaza un poco al alza, pero tampoco sustancialmente, dado que para un hijo por ejemplo, nos vamos a un salario bruto de 35.000 euros para pagar ya más cuota tributaria que en 2011.
El otro punto fundamental es el efecto que tiene la integración de otras rentas asociadas a los rendimientos del trabajo. Supongamos una persona que obtiene una ganancia patrimonial superior a 6.500 euros por la venta de una plaza de garaje y que gana 12.000 euros al año. Ahí el efecto tributario sobre los rendimientos del trabajo es devastador, dado que deja de reducir 3.400 euros y por tanto pagaría 720 euros más de cuota en el IRPF sobre el cuadro
PD2: Pues siguiendo con este cúmulo de deudas que acumulamos, Warren Buffett lo tiene muy claro: la deuda es lo que desquicia un país, una empresa, un hogar…
Deudas acumuladas por pura avaricia, por puro afán de poseer más sin tener el dinero para pagarlo…