06 abril 2016

indisciplinados

No hay disciplina ninguna. Están haciendo lo que quieren, y los grandes inversores se asustan. Y los pequeños no se mueven…, atónitos por ver que no hay rendimiento alguno en renta fija, y viendo como los mercados no se acaban de orientar al alza y vuelven a caer. No es para menos. Lo de las últimas semanas no era más que un rebote técnico, un short covering de posiciones cortas… La mayoría de las veces, el que mueve el mercado son los especuladores y nosotros vemos impávidos hacia donde lo van llevando…
Del sector bancario no te digo nada más… No mires sus cotizaciones y ni se te ocurra comprar: no están baratos los bancos, y no lo estarán hasta donde podrían caer… Ayer de nuevo hubo un gran desconcierto con enormes mustiazos de la banca europea, lideradas por el Deutsche Bank que palmó ayer un 5% y se ha vuelto a los mínimos de febrero. Ya sabes mi opinión. Los bancos no tienen margen con estos tipos de interés y sus altos costes generales. Ya han empezado a cerrar oficinas deprisa y corriendo. Sobrecapacidad total de sucursales y de bancos: sobra de todo, muchas sucursales y demasiados bancos, pero ¿quién pagará el cierre en esta nueva reconversión? Los accionistas… ¿Se concentrará más el sector como es necesario? Lo dudo, demasiadas poltronas que perder… Y la amenaza de la banca nueva digital…
Mira los rendimientos de ayer de los bonos:
El mercado de bonos es de locos… Es un sinsentido y, antes o después, los mercados se darán la vuelta y la curva de tipos europea se parecerá más a la estadounidense… ¿Tiene algún sentido la prima de riesgo española? Ninguno. Estamos como ya sabes y dudo que esta sea nuestra prima de riesgo real…, que refleje nuestra coyuntura y expectativas. Está intervenida, la marca el BCE… ¿Hasta cuándo? ¿Un año más? A lo sumo…, y luego…
No está en la misma situación la economía española que otras de fuera. Frecuentemente hablo con un amigo mío que vive en Alemania y se asombra de lo bien que van allí las cosas y lo mal que las ve en España. No todos los países estamos igual, y eso queda reflejado en la situación de los bonos y de la bolsa española… El futuro pinta un panorama aterrador… Mientras, seguimos esperando a que venga alguien a arreglarlo y tal…

Sin disciplina del mercado

A pesar de la mala fama de los "mercados financieros", estos cumplen un papel fundamental exigiendo a los distintos emisores cumplir con las previsiones y con los compromisos hechos a los inversores. De no hacerlo, los emisores de bonos verán como la rentabilidad exigida a las nuevas emisiones se incrementará, obligando a los responsables de las entidades emisoras a corregir el rumbo y cumplir con las previsiones comunicadas.
Actualmente asistimos a unos mercados financieros, sobre todo los de bonos soberanos, más intervenidos que nunca. Los precios, y por tanto los tipos de interés, no responden a la libre confluencia de oferta y demanda. Los tipos pagados por los emisores están condicionados por la intervención del Banco Central Europeo en el caso de los bonos de los distintos estados del euro, incluido España, y por la garantía "verbal" dada por la Administración Central en el caso de los bonos de las distintas Comunidades Autónomas (CCAA).
Cuando un emisor no tiene que someterse a la disciplina del mercado porque tiene la certeza de que otro acabará pagando sus deudas, su incentivo para cumplir los compromisos suele evaporarse. No es ninguna sorpresa que el déficit de las CCAA en 2015 haya sido del 1,66% del PIB frente al 0,7% previsto. Desde el momento en que desde el gobierno central se dijo que ninguna CCAA impagaría sus bonos y se ha facilitado liquidez a todas las CCAA que lo han solicitado a tipos mínimos a través del Fondo de Liquidez Autonómica, el compromiso de contención del déficit se ha relajado en exceso en muchas de las CCAA. El incentivo de cualquier gobierno autonómico a cumplir con la contención del déficit desaparece si los responsables gubernamentales manifiestan que ninguna CCAA impagará, considerando que de facto cuentan con el respaldo del Estado. Los nocivos efectos ya los estamos viendo.
En el caso de los bonos del Tesoro español el mercado también está totalmente intervenido por la actuación del Banco Central Europeo. Los tipos de interés a los que está consiguiendo emitir el Tesoro español (y el resto de Tesoros de la Eurozona) no responden a la libre confluencia de oferta y demanda, sino que vienen fuertemente condicionados por la política expansiva del BCE.
A cualquier prestatario que año a año aumentara su nivel de deuda, se le exigiría en cada nuevo préstamo un tipo de interés superior al incrementarse el riesgo, pudiendo llegar el momento en que los prestamistas no estuvieran dispuestos a prestarle más. Pues bien, con la deuda pública ocurre lo contario: se multiplica por tres el nivel de deuda y simultáneamente el tipo de interés exigido no sólo no se incrementa, sino que se reduce.
El incumplimiento del déficit público español en 2015 ha sido de 1% del PIB: 5,2% en lugar del 4,2% sin que la cotización de los bonos del Tesoro se haya resentido ni un ápice, incluso han subido de precio. No habría sido así si no se contara con el respaldo de la actuación del BCE y con el convencimiento de que éste seguirá existiendo de forma indefinida.
La intervención del BCE lleva a no tener que someterse a la disciplina del mercado. La situación actual contrasta con los momentos de mayor tensión de los bonos soberanos españoles en verano de 2011 (tipos del 7%) cuando la presión de los mercados financieros llevó incluso a los dos principales partidos políticos a ponerse de acuerdo en cambiar la constitución en apenas un mes. Ahora claramente dicha presión no existe.
La intervención del BCE no será permanente en el tiempo. En algún momento será imprescindible tener que volver a someterse a la disciplina de los mercados financieros. Cuando esto suceda no faltarán las voces que vuelvan a culpar a los mercados de la situación, cuando deberían mirar en otra dirección.
Hay que seguir invertido en los mismos sitios que hicimos en 2008, buscando preservar el capital, las mismas ideas de cuando todo estalló… Abrazos,
PD1: Las valoraciones de las bolsas: Las que más han subido muy caras, y las que no muy baratas…
Recientemente, la bolsa estadounidense no paró de subir, mientras las europeas cedían y sus beneficios menguaban… Próxima a sus máximos, ajena a los recortes de beneficios, y a que ya no tiene QE… Además, están en fase de subida de tipos… Les da igual!!!
Interesante ver que vuelve el flujo hacia las bolsas emergentes:
PD2: Esto se lo debes reenviar urgentemente a tu mujer…, no para echárselo en cara, sino para que lo practique… Y vosotras mujeres, más detalles con el esposo, caramba!!

13 maneras heroicas de demostrarle a tu esposo que lo amas

1 Nunca, jamás te quejes de él frente a amigos o familiares

Esto es una de las cosas que más nos avergüenzan. Entre hombres la lucha es constante por quedar bien. Si nos avergüenza nuestra propia esposa quejándose, aunque tenga razón, algo en nuestra masculinidad muere. Somos un equipo y la lealtad y el cuidado mutuo es esencial para proteger la relación.

2 Evita hacerle sentir mal cuando haces las labores de la casa

Es sabido que ustedes (las mujeres) se llevan gran parte de las labores de hogar y ya sea por mal hábito, cultura, costumbre o crianza; a los hombres nos cuesta tomar la iniciativa en estas cosas. No creas que nos hace sentir orgullosos el no ser buenos en las cosas de la casa. Cada vez que quieras que colabore no se lo restriegues en la cara ni te quejes, motívale con amor.

3 Mira una película de “hombres” con él

Es sencillo. Nos gustan los autos, las explosiones, los disparos y la emoción. Sabemos que preferirías una comedia romántica… pero es bueno acompañarnos y compartir los gustos. Aunque somos un poco herméticos con nuestros espacios, es lindo que quieras formar parte de ellos.

4 Busca complementar más que criticar

La mayoría del tiempo nos damos cuenta cuando hacemos algo mal. Que el instinto masculino nos haga difícil asumir los errores frente a otros, es otra cosa. No es necesario que lo recalques. Complementa, corrige con amor, orienta y comprende. El diálogo y el animarse mutuamente son el centro de la conversación cuando hay diferencias. Piensa en cómo  mejorar las cosas en vez de que solo buscar lo que está mal

5 Permítele tener tiempo para sí mismo

Aunque gaste ese tiempo en cosas que parecen sin sentido e inútiles, regálale ese espacio para su pasatiempos, su descanso o lo que sea que haga. Los hombres necesitan tiempo para hacer “nada” y no sentir remordimiento por gastar ese tiempo.

6 Haz lo posible por mantenerte atractiva para él

No lo veas como una invitación a competir con las demás mujeres y mantener a tu hombre en casa, sino como un gesto de amor y preocupación. Nadie habla de caer en superficialidades y contratar alguien para que te haga un “fashion emergency”. Es comprensible que el poco tiempo que nos deja la rutina semanal no permite hacer ejercicios, comer bien y todo lo que uno quisiera para mantenerse en forma, pero gestos pequeños, como vestirse especial o maquillarse cuando van a salir juntos puede marcar la diferencia.

7 Dile que estás orgullosa de él

Él debe suponer que es importante en casa por su aporte en la economía del hogar y la imagen de autoridad con los niños, pero es buena idea decirle que lo hace bien cuando lo hace bien, no esperes a los discursos en fiestas importantes para hacerlo. Los hombres somos concretos y a veces los gestos sutiles que haces para demostrar tu orgullo pasan desapercibidos y no notamos lo que nos quieren demostrar. Simplemente dilo con palabras: estoy orgullosa de ti.

8 Bésalo como lo que realmente significa

Como esos novios adolescentes, como esas despedidas terribles que tenían esos días en que no querían separarse, como esos días en que se reconciliaron luego de una discusión fuerte. Un beso con amor y ternura no solo desconcierta, sino que refresca y recuerda ese sentimiento original que a veces se olvida.

9 Perdónalo cuando se equivoca

Va a ocurrir más de lo que te gustaría. Por lo tanto no le perdones como costumbre, perdónale como un gesto de amor y compresión. Los hombres nos equivocamos mucho y nos avergüenza reconocerlo y pedir perdón. Perdonarlo le hará saber que aunque se equivoque, sigue siendo amado y así aprenderá a pedir perdón cuando falle.

10 Ámalo cuando haya tenido un mal día

Hay una relación directa entre un mal día en el trabajo y el mal carácter al llegar a casa. Más directa es la relación si no le gusta su trabajo; siempre llegará agobiado a casa. A los hombres les cuesta disociar ambas cosas. Ámalo aunque sea un pesado, pero ayúdale a que el trabajo se haga más liviano, aconséjalo, reza por él y apóyalo si tiene una nueva iniciativa laboral.

11 Se agradecida cuando ayuda

Aunque no sean grandes cosas, cuando colaboramos en las cosas de la casa para muchos es un esfuerzo fuera de lo común y somos torpes en esas tareas, de hecho estropeamos muchas de las cosas que tratamos de hacer bien. Sé agradecida, aunque sea algo pequeño y tengas que ir tú después a hacerlo de nuevo, pero bien hecho.

12 Sé honesta

Él necesita que le digas lo que estás pensando cuando te lo pregunta. No respondas “nada”, sé honesta, pero conjuga el amor con la honestidad. Necesitamos saber lo que pasa por la cabeza de nuestras esposas. Suena como chiste, pero la mayoría del tiempo realmente no sabemos qué es lo que les pasa y no es por desatentos o por distraídos, es que simplemente no lo sabemos y necesitamos de su honestidad.

13 Reza por él a diario

El ingrediente secreto y la expresión de amor más profunda: serle fiel en la oración diaria por él. Lo mejor y más grande que puedes regalarle es a Dios. Presentarlo a diario en tu oración, tocará el corazón de Dios. Probablemente tu esposo no es un hombre de mucha oración y fe, pero ustedes dos son una sola carne; se para él un soporte espiritual.
Mi doña me mima y me demuestra su amor siempre. Quizás algún beso más de tornillo echo en falta, pero todo se andará…