Antes de este fin de semana había unos bancos que tenían unas pérdidas descomunales, por no ser capaces de valorar su mora de los promotores, del suelo, de las hipotecas de los pisitos que fueron dando en la bonanza que tuvimos y que había generado que se comieran sus recursos propios y estuvieran completamente quebrados… ¡Qué te voy a contar a ti de Bankia que te lo sabes ya todo…!
Pues a partir del sábado, esos bancos van a ser recapitalizados por completo y ahora los que tenemos unas pérdidas descomunales de esa burbuja inmobiliaria somos nosotros, pero sin tener ningún activo a cambio.
Qué sí, que nos vamos a quedar con una cosa llamada acciones de Bankia para que Goizigoizirriski ese haga lo que quiera a costa del erario español, es decir, a costa de nosotros… Unas acciones que valen cero ya que supongo que los famosos 19.000 millones no era para hacer negocio y cobrarse más bonus, espero, sino era para dejar el banco justo a cero, no con patrimonio negativo como lo dejara el gran gestor llamado Rato…
Pues eso, en unos días hemos pasado los españoles de no tener nada, a tener un debe de los despilfarros de los banqueros que por desgracia nos tocó tener, que Dios guarde y premie… Todos esos banqueros políticos, y no políticos que hay por ahí cosas dignas de ser vistas…, que muchos siguen en la pomada, haciendo todavía de las suyas, ¡acojonante que los que nos metieron en este fango sean los que nos saquen de él!, venga ya hombre, por Dios… Y sin ayudar a los pobres hipotecados, estafados por la burbuja, ni a los que les animaban a comprar hipotecas… No salvamos los bancos y los depositantes, pero los del otro lado, los hipotecados, que se jodan, con perdón.
No es que no tengamos nada ahora, es que tenemos un debe de 100.000 millones de euros, o lo que es lo mismo, 16,6 billones de las antiguas pesetas, a las que tan pronto volveremos… Es un pastizal, la leche en vinagre y un poco más. Hace poco te conté lo que eran 4 billones de pesetas (lo que nos iba a costar Bankia) que no me cabía en la cabeza. Pues la bromita de Bankia era mucho más, fue el preludio de la galleta que íbamos a tener que pagar todos los españolitos después.
¿No hubiera sido mejor haber dejado quebrar algunas de estas entidades metidas a banqueros, que haberlas saneado con un dinero que no tenemos, a costa de todos los españoles, de ésta y de las dos siguientes generaciones? No contestes muy rápido, piénsalo. Te lo aseguro, Rajoy y ZP pasarán a la historia por ser los culpables de no haber permitido quebrar los bancos, por unos errores de unos gestores y habernos hecho partícipes de los mismos al resto de personas que ni lo comimos ni bebimos…
No vale decir que íbamos a salvar a los depositantes. Si no estaba todo perdido. Si Bankia tiene 300.000 millones de euros de depósitos y el agujero era de 19.000 millones. Pues la quiebras, pierden los accionistas, pierden los bonistas, pierden los pobres incautos que les estafaron y compraron los preferentes…, y el resto se procede a la liquidación de sus activos y si hay que hacer una QUITA de un 20% a los depositantes, pues se hace. Pero no, ahora nos hemos metido en un lio formidable. Salvamos a Bankia, a las otras mierdicajas quebradas, a los siguientes bancos medianos que ya veremos lo que nos cuentan que tienen. Y los grandes no que están cojonudos…, que fueron más listos que el resto… Ya. No se lo creen ni ellos.
Tengo un mosqueo que no te menees. Lo cojonudo del asunto, es que parece que nos han hecho un favor, que no había ninguna alternativa, que no traen ninguna consecuencia este RESCATE A LOS BANCOS para los españoles… Eso es M E N T I R A… Yo lo sé y a ti que te lo cuento. Pero no polemicemos, cada uno sabe lo que sabe y cree en lo que cree… y aún así, podría estar yo equivocado y todo lo que dicen los políticos y periodistas ser la verdad de las verdades…
Además, ya te conté que con los socios no se juega. Nos la van a guardar los de la UE: hemos perdido las formas. Ya nos pasarán factura. Estamos gestionando no muy bien estos meses de necesidad. Lo estamos haciendo de asco, exigiendo una serie de cosas, presionando a los demás…, a nuestro socios, para no decir que es un rescate, pardiez, para sacar más tela, qué cosas… Por favor, que orgullo más mal entendido. La siguiente vez que vayamos a negociar nos mandarán a la M. No, les podemos decir que tienen las manos atadas, que el que tiene un problema son ellos, aunque en un momento determinado, nos van a mandar a freír espárragos…
Pues no Presidente del Gobierno, menos Uganda y mejor negociación y mejor gestión de los bienes escasos (compre una tijera afilada y úsela). Seguimos dando bandazos y esto nos genera más incertidumbre, esa que teníamos que quitar y que sabíamos perfectamente cómo. Un triste abrazo, deseando que cambie este sesgo horrible que tenemos. Por cierto, los engaños duran un telediario… Mire como está ya la Prima de Riesgo y la bolsa en breve seguirá con el mustio del último mes…
PD1: Desde Expansion no lo ven claro:
Diversos analistas han señalado que el plan de ayuda a la banca no soluciona los problemas actuales de España y auguran un ulterior rescate soberano
A medida que se asienta la noticia de que la banca de España ha sido rescatada, son cada vez más los analistas que ponen negro sobre blanco los problemas que pueden derivar de la operación puesta en marcha. A continuación, recopilamos algunas de las cuestiones que más temen estos expertos.
1. Problemas de deuda. El profesor de la Universidad de Columbia, Xavier sala i Martín, destaca que, por mucho que se empeñe el Gobierno español en negarlo, según se ha redactado el acuerdo del Eurogrupo "no se rescata directamente a los bancos, sino que se da un crédito al Estado". De este modo, la deuda pública española aumentará, lo que añadirá más presión a la banca. Para Paul de Grauwe, responsable del think tank Bruegel, el rescate de España "no resuelve nada porque añadirá carga extra a la deuda española". Este hecho provocará "pronto" una crisis de la deuda pública española, añade este experto. Los analistas del Financial Times consideraban ayer que ésta va a ser una de las cuestiones candentes en la cumbre europea del 28 y 29 de junio.
2. Otro rescate en ciernes. Para la analista de Roubini Global Economics, Megan Greene, esta reforma no va a servir para restaurar la confianza en el sector bancario español. Para empezar, no cree que vaya a frenar la fuga de depósitos que se está produciendo. Para continuar, considera que no se recuperará la confianza en la banca salvo si los escenarios de estrés que se aplican a la banca incluyen caídas del precio del 20% en el sector inmobiliario en 2012 y varios años de recesión económica en el país. Y para acabar, la posición de la deuda española será "más insostenible" tras esta operación de rescate. Green considera que "en ausencia de crecimiento económico, el rescate a la banca española irá seguido de un rescate soberano".
3. La prima de riesgo. El analista de Financial Times Gavyn Davies hila más fino. También considera que las estimaciones del FMI (que cifran en 40.000 millones de euros las necesidades españolas) se pueden quedar cortas. Pero, sobre todo, cree que si la inyección se hace a través del fondo de rescate conocido como ESM, que sustituye en julio al EFSF actual, esa deuda será de la denominada como sénior. Esto es, tendrá prioridad de cobro, lo que elevará al alza la prima de riesgo por el temor de los poseedores de deuda anterior. Ese aumento de la prima de riesgo "también será un cargo mayor a cargo del contribuyente", opina también Sala i Martín.
4. Las contraprestaciones. Mientras el Gobierno insiste en que no hay contraprestaciones, las cosas no parecen estar tan claras. Sala i Martín destaca que el Eurogrupo "va a ser inflexible en materia fiscal y macroeconómica y que hay una velada relación entre la ayuda financiera y el cumplimiento de las condiciones fiscales y macreconómicas". De hecho, hay consenso en que la subida del IVA y el adelanto de la reforma de las pensiones son aspectos que se van a tener que aprobar a no mucho tardar.
5. Las nacionalizaciones. Sala i Martín también señalaba que los costes para el erario público de todo este proceso no se podrán determinar hasta que los bancos nacionalizados no sean puestos a la venta y entonces se mida el impacto del proceso. En cualquier caso, urgía a la unidad de todos los partidos políticos para no hacer leña con el delicado momento de la banca española.
6. Falta el "gran plan". Andrew Benito de Goldman Sachs calificaba ayer de insuficiente el plan presentado. En su opinión, la ayuda a la banca debería ir acompañada de un plan fiscal a medio plazo que garantizara la reducción de la deuda. El problema, añade, no es el nivel de la deuda, que es menor que el de la mayoría de los países de la UE. La cuestión es la falta de un plan de a un plazo de cinco años pueda poner en contra a la ratio deuda/PIB. Asimismo, señala que sigue faltando una solución europea a los problemas actuales y se fomenta las correcciones país a país.
PD2: Y por su parte, Luis Garicano en el Mundo dice:
Lo importante es que el rescate funcione. ¿Cómo lo sabremos? Muy fácil. Funcionará si la brutal salida de capitales de España de los últimos meses se detiene, y comenzamos a ver inversión extranjera. Es decir, funcionará si sirve para devolver la malherida confianza de los inversores en España. ¿Será así?
Sin duda, parte de la incertidumbre va a desaparecer, ya que es en el sector financiero donde se encuentra el mayor problema inmediato. Y las buenas noticias, a pesar de todo, existen: la deuda pública sigue siendo mucho más reducida que la media de la UE, los costes laborales unitarios descienden, recuperando competitividad, las exportaciones se han comportado de forma excelente, al menos hasta hace pocos meses, y el déficit por cuenta corriente, que refleja cuanta financiación exterior necesitamos, ha bajado del 10% a algo más del 3% en estos años.
Pero entonces, preguntarán, ¿cómo es posible que la cuarta economía de la UE no pueda acceder al mercado, que tenga que pedir un rescate por un agujero de menos de 40.000 míseros millones? ¡Si el rescate de tres bancos ingleses costó 47.000! Sencillamente, porque durante estos años el mundo ha perdido su confianza en España y en sus instituciones por la misma razón que la han perdido los españoles: la asombrosamente mala gestión de la crisis desde que ésta comenzó. Todas las realidades se han negado, todas las decisiones se han tomado tarde, empezando por la inicial huida hacia adelante en el sector financiero del Gobierno de Zapatero y el descontrol de los déficit autonómicos, y terminando por este inevitable rescate al Estado para que rescate a su sector financiero.
El nuevo Gobierno ha tenido una oportunidad única para devolver la confianza, llegando con mayoría absoluta y con un impulso enorme de los españoles que querían ver cambios sustanciales. Y sí, al final las decisiones se terminan tomando en muchos casos, pero siempre a regañadientes y tras jurar que no se tomarían, y en todo caso nunca en el contexto de un plan de futuro. El resultado es que la incertidumbre entre consumidores, inversores y entre nuestros socios es máxima. Nadie puede invertir, ni tomar decisiones, porque hasta ahora nadie sabe realmente cuáles son los planes del Gobierno a medio plazo.
Generar confianza requiere certidumbre, seguridad jurídica, estabilidad. Requiere saber lo que vamos a hacer, qué modelo de país queremos. ¿Uno donde se tomen las agencias por los políticos, en base a amigos? ¿O uno con fuertes instituciones y agencias independientes que protejan a los ciudadanos? Y transmitir esta confianza no es cuestión de comunicación y mensajes, sino de hechos. Salvo la presidenta de Madrid (con su decisión de reducir el Parlamento autonómico), la mayor parte de las decisiones han impuesto costes a los ciudadanos, no a la clase política.
España necesita reformas profundas del funcionamiento del Estado y de los incentivos de la clase política, no recortes cosméticos. Necesita también cambios profundos en Justicia y en la regulación de los mercados. Necesita incrementar los ingresos del Estado, en este momento los más bajos de Europa. En definitiva, necesita asegurar la sostenibilidad del Estado del Bienestar, reconociendo que, como país, nos hemos corrido una fiesta gigante y que no nos podemos permitir seguir en ese camino. España no debe ser el país con más kilómetros con AVE de Europa.
Hay que utilizar esta situación para un nuevo comienzo para España, un comienzo que será difícil, en una situación extrema para la economía mundial. España no debe bajo ninguna circunstancia presentarse en diciembre pidiendo una segunda ronda.
PD3: Si todavía tienes dudas, te digo yo y lo dice todo el mundo, SI ES UN RESCATE: Los socialistas negaron la crisis, los peperos el rescate, ¡que memos! Desde FEDEA:
Cuatro Preguntas Sobre el Rescate
¿Es o no es un rescate?
Claro que sí. El préstamo de hasta 100.000 millones que las instituciones europeas han concedido al Tesoro de España es un rescate en toda regla. Es innegable que el Tesoro español no ha sido capaz de recapitalizar por sí solo a la banca española, y que ha tenido que solicitar ayuda a los contribuyentes del resto de los países de la Eurozona. Cuando Alemania, Holanda, Francia o Bélgica recapitalizaron sus bancos no tuvieron ese mismo problema. Pero cuando Grecia, Irlanda o Portugal recapitalizaron a los suyos, si lo tuvieron. Las justificaciones —que el origen del problema sea el diseño del euro, o que la política del Banco Central Europeo ni sea, ni haya sido la correcta— y los condicionales imposibles —que si el anterior gobierno no se hubiera empecinado en negar la crisis de la economía, o que si el gobierno actual no se hubiera empeñado en negar la de Bankia, no habríamos necesitado el rescate— son irrelevantes. Al fin y al cabo, si yo tuviera abuela, y si mi abuela tuviera ruedas, sería un autobús. Total que por mucho que lo negara el Presidente del Gobierno en su rueda de prensa del pasado lunes 4 de junio, el sábado 9 de junio, tan solo cinco días después, el Eurogrupo anunció el rescate de la economía española. Y ya está.
¿Es este rescate como los dos de Grecia, el de Irlanda y el de Portugal?
En lo que respecta a la cuantía del rescate, no. En números redondos los dos rescates de Grecia, el de Irlanda y el de Portugal supusieron aproximadamente el 50 por ciento de sus Productos Interiores Brutos (PIB) y el rescate anunciado para España supone tan solo el 10 por ciento del suyo.
En lo que respecta, al destino del rescate, tampoco. Aquellos rescates sirvieron para financiar al soberano y a la banca, y este rescate, al menos en principio, esta dirigido específicamente a financiar a las entidades que tienen dificultades.
En lo que respecta a las condiciones del rescate, no está muy claro. Las declaraciones oficiales nos aseguran que esas condiciones sólo van a limitar la capacidad de actuación de las entidades que necesiten recapitalizarse, y que nuestros socios europeos no van a imponer al Gobierno de España condiciones macroeconómicas adicionales. Pero yo no sé si me lo creo. Ya veremos cuáles son las garantías que nos termina exigiendo Alemania por boca de Finlandia y Holanda. Personalmente, me parecen muy probables una subida del Impuesto sobre el Valor Añadido antes de fin de año, en contra de los anuncios oficiales, un endurecimiento de las condiciones del seguro de desempleo y una aceleración de los plazos de la reformita inútil de las pensiones, quizás aprovechando, ¡ay!, el inminente recurso al inexistente, por ya gastado, Fondo de Reserva de las Pensiones para poder pagar la extra del mes de julio —pero ésa es una historia que dejamos para otro día.
En lo que respecta al tipo de interés y, lo que es más importante, al plazo de devolución de los fondos del rescate, todavía no los sabemos. La alternativa ideal para despejar muchas de las dudas sobre la solvencia de España habría sido que las instituciones europeas hubieran inyectado capital directamente en Bankia y en las restantes entidades con problemas, convirtiéndolas de facto en la primera banca europea y librando al contribuyente español de una de sus peores pesadillas. Pero desgraciadamente el Eurogrupo, que no quiere meterse en esos líos, ha optado por rescatar al Tesoro español, que es el garante último de esos fondos. La mejor alternativa entre las restantes es que el plazo del crédito sea lo más largo posible, pongamos que de 30 años. Un plazo de tres años, como los concedidos a Grecia y Portugal, sería desastroso. Uno de unos 10 años, como es el plazo medio de los créditos a Irlanda, creo que sería insuficiente. Y uno de 20 años o más nos permitiría respirar y nos compraría tiempo necesario para seguir avanzando por la senda estrecha y empinada de las reformas.
¿Quién va a pagar el rescate?
Los contribuyentes españoles, ¿quién si no? No sabemos cuándo vamos a pagar el rescate, y no sabemos cuánto nos va a costar. Pero este crédito, como cualquier otra deuda que contraiga el Gobierno, siempre termina pagándose con más impuestos, retrasa las fechas de la liberación fiscal de los años venideros y compromete a los contribuyentes españoles a trabajar para sus prestamistas extranjeros en algún momento del futuro.
¿Y después del rescate qué va a pasar?
Naturalmente no lo sé, porque no soy adivino. Pero puedo hacer algunas conjeturas. Creo que, hasta que el futuro del euro no termine de aclararse, seguirá habiendo mucha volatilidad en los mercados, y que la prima de riesgo española no va a experimentar un retroceso importante en las próximas semanas. También creo que las dudas sobre la solvencia de España no van a disiparse, a pesar del rescate, porque, en los próximos meses, la clave va a estar en el cumplimiento del déficit. Y creo que acercarse al seis por ciento en 2012 y al tres por ciento en 2014 va a exigir un nuevo calendario de reformas. Pero, a tenor de lo que hemos visto hasta ahora, mucho me temo que este gobierno no va a ser capaz de estar a la altura de unas circunstancias tan exigentes.
PD4: Krugman cree que lo del rescate a España no sirve para nada, solo hemos comprado algo de tiempo…:
OK, so Spain gets a bank bailout. It’s basically like the TARP: a Spanish government agency will give banks cash, presumably in return for an ownership stake, with the goal of reassuring depositors and interbank lenders that their funds will remain safe even if the banks turn out to have big losses; the point is that these losses will initially come out of the new cash hoard, so that default on debts won’t happen.
The twist is that the Spanish government itself is cash-poor and must pay high rates to borrow on the market, so this money comes as a loan from stronger European economies, presumably at below-market rates.
The question you should ask is, what problem does this solve? It may — may — put a temporary end to the “doom loop” of funds fleeing Spanish banks, forcing the banks to sell assets, driving asset prices down and creating further doubts about solvency. (It won’t help even here to the extent that fears involve euro breakup rather than default). But it does nothing to restore Spanish competitiveness or lessen the suffering from austerity.
So the whole thing at best buys time — just like the ECB’s lending program from last fall. What will Europe do with that time? If past behavior is any indication, the answer is, nothing.
PD5: El apalancamiento bancario no es sólo un problema español, es un problema europeo que ocurre en todas partes de la UE. Se dedicaron los bancos a prestar lo que no tenían, se apalancaron dando más y más créditos, para obtener como fuera más beneficios… Llegaron a acumular créditos sobre depósitos en un ratio de 1,8, cuando nunca se debió de pasar de 1, es decir, si tengo 1000 en depósitos, concedo 1000 en créditos. Pues no, tenían 1000 en depósitos y concedieron 1800 en créditos… Y esto va a generar que tengamos un credit crunch en toda Europa hasta que desapalanquemos el sistema de nuevo, algo que requiere muchos años y muy buenos pagadores… No tenemos ni unos, ni otros…
Bancos deudores y bancos acreedores. Ya intuyes quien es quien:
En azul: Grecia + Italia + Irlanda + Portugal + España
En rojo: Alemania + Francia + Holanda + Luxemburgo
PD6: Los depósitos de los guiris en los bancos españoles:
PD7: Nuestro problema, el por qué nos vamos a la mierda: Los No Residentes siguen vendiendo y los domésticos compran bonos públicos financiados por el BCE. ¿Qué pasará cuando se acabe esta financiación, quién comprará los bonos a los NO RESIDENTES? Nadie.
PD6: El lema de Cáritas es fabuloso: Vivir es amar. Amar es servir. Pues eso. Para vivir hay que servir ya que es la forma de estar amando… Lo demás son obstáculos. Dejar tranquilo el Yo y pensar en el Tú…, es la única forma.